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Gnosis Primordial Entradas

Drácula y el secreto del vampiro -Segunda parte-

Por Christian C.

En términos esotéricos se comprende que la mordida del vampiro es análoga a la mordida de la serpiente, o de la mujer serpiente, Lilith.

Tal mordedura confiere la gnosis, y el depertar en la propia sangre. En efecto, ese veneno serpentino irrumpe en la sangre del Virya, detectándose desde lo demiúrgico como un agente invasor, una clase de virus.

Y es que , en esa instancia iniciática, los colmillos de la serpiente hundidos en la piel, inoculan el veneno que mata la vida cálida de la sangre, iniciándose una revolución sanguinea que puede culminar en el propio despertar reptílico, con todo el potencial que esto implica.

Esa es la razón de la completa anatemización del vampiro, ya que contiene en si el secreto de la Serpiente.

No obstante, siendo que el ataque vampírico es desde el aspecto depredador reptil, obsevamos que en algunos casos la «víctima» del vampiro muere, en tanto en otros casos el resultado es que se torna también un vampiro.

Esto tiene relación con la pureza o impureza de sangre del Virya. Ya que si Lilith o sus agentes vampíricos detectan una gran impureza en la sangre, más propia de pasú que de Virya, con pocas posibilidades de transmutación, entonces se drena la fuerza vital, desechando un elemento inservible, que no es más que carroña demiúrgica.

Más si por el contrario, el Virya tiene cierto resabio rescatable en su memoria de sangre, entonces el vampiro además de inocularle su veneno a través de la mordida, le da a beber de su propia sangre, que combinada con el veneno, deviene en el elixir.

En tal caso se dice figuradamente que Dracula ha conquistado a Minna. (Minne, o memoria de sangre).

Y es que en la excelente obra de Dracula , tenemos la conjunción ofídica perfecta entre Dracula (siendo Dracul dragón), y Minna, a quien Dracula procura rescatar, para pase de ser mortal a mujer serpiente.

La condición de vampiro tiene así relación con el estado de inmortalidad (fruto que ancestralmente ofrece la Serpiente), siendo catalogado desde la limitada comprensión humana como «no muerto». Más la realidad es que el vampiro es un muerto en vida (ya que ha cortado todo vínculo con lo anímico/emocional y la vida cálida, pudiendo no obstante manifestar estos aspectos en forma de ilusión controlada), y a la vez se halla vivo en la muerte, ya que su existencia mora más allá de la condición espacio-temporal de este mundo.

Siendo así, aquel que se ha tornado un vampiro, ha despertado su propia «sombra» en la muerte, duplo o doble que puede proyectar desde el cuerpo físico a voluntad, pudiendo asumir cualquier forma, o sin forma, e incluso densificar esa proyección, en una forma perceptible para otros.

De este modo se puede vincular el misterio del vampiro con la licantropía, ya que el vampiro puede asumir incluso la forma de lobo.

Precisamente, en sus mismas raíces etimológicas tenemos el antiguo término eslavo «oper» (del que derivará posteriormente el polaco «wampir», o en variadas lenguas eslavas «vampir», y en francés e inglés «vampire»), que significa «volador», «bebedor» (de sangre o energía vital, se entiende) y «lobo».

Así encontramos en distintas leyendas a vampiros asumiendo la forma de lobo, murciélago, serpiente, niebla,fuego, etc.

Haber alcanzado esa condición es sin duda el fruto maduro de un proceso de alquimia siniestra…

En las apariciones de un vampiro (incluso en la historia de Dracula), además del cambio de forma, es común que pueda aparecer frente un mortal estando como suspendido en el aire.

Todo esto indica muy claramente, que posee la capacidad de mover y manipular los átomos gravis a voluntad.

Cabe acotar en efecto, que el kalas rojo de la mujer serpiente posee en si tanto la sangre como el veneno, siendo así un elixir que puede transmutar y llevar a esta condición del vampiro.

De hecho el vampiro contiene en su esencia, el secreto de la serpiente. Secreto oculto, que únicamente alguien cuyos ojos han sido abiertos por el fruto prohibido de la serpiente puede comprender.

La variante linguística «upior» tiene un significado en tradiciones turcas y eslavas tanto de «vampiro» como «bruja». Asomándose así la verdad oculta que aquellas poderosas brujas oscuras, hijas de la Serpiente, poseen o dominan este antiguo arte del vampirismo.

Retomando el nombre de Dracula, sabemos que significa «hijo del Dragón», como también se le da la acepción actualmente en rumano, de diablo.

Así, aparecen todos términos de antiguos misterios proscritos: El vampiro, el lobo, las brujas, y el diablo…

Esa condición de «seres malditos» como les ha calificado la proyección cultural sinárquica, se debe a que en su propio origen se vinculan a figuras o personajes ya proscritos desde el inicio!

Se dice que los vampiros tienen como ancestros en su cadena vampírica o linaje, a Cain y Lilith.

Lo cierto es que el origen del vampirismo se pierde en la noche de los tiempos, ya que tiene relación con el ancestral y primer misterio: La sangre!

Aunque la sociedad promedio asocia al vampiro con Dracula, en rigor de verdad el vampiro es muchísimo más antiguo que la producción literaria de Bram Stoker!

Es comprensible por lo tanto que se encuentren mitos y leyendas de vampiros en todo el mundo, desde la remota antiguedad. (Al igual que la Serpiente, cuyos mitos y simbolismo se hallan presentes en todas las culturas), desde Mesopotamia, Egipto, Africa, India, China, Mesoamérica, etc.

En el caso de la India reciben el nombre de Vetalas, y se hallan bajo la tutela de la Diosa Kali. Esto necesariamente es así, ya que la propia Kali manifiestó una condición vampírica al beber la sangre del demonio Raktabija.

También una forma y manifestación de Kali, Guhyakalika (La Kali oculta) tiene especial y directa relación con los Vetalas.

Un caso similar de otra Diosa que bebe sangre, lo encontramos en Egipto, con la Diosa Sekhmet.

Bien ,concretamente en Egipto hallamos un antiguo manuscrito, que la ignorancia y desinformación sinárquica han caratulado como «Himno canibal». Más en rigor de verdad (pese a tener claros elementos de antropofagia), tenemos aquí el primer registro de un ritual vampírico.

Se trata de un rito oculto, en que el faraón (quien tenía acceso a los misterios iniciáticos) comía la carne y bebía la sangre de los Dioses.

Es un ritual de orientación Sethita, es decir que remite al Dios Seth, quien se oponía a los otros Dioses, de donde nuevamente asoma la clave de la tradición vampírica como opuesta al mundo demiúrgico.

Tenemos así también indicios de la tradición vampírica que se remonta al antiguo Egipto, concretamente desde el Dios Seth.

Precisamente, según algunos ocultistas, desde Egipto se expandió la corriente vampírica en una línea que a través del tiempo arribó a Europa del este, Constantinopla, y eventualmente la Rumania del siglo XV, en aquel tiempo Valaquia, que comprendía asimismo cierta frontera con Transilvania. Fue así como nobles de la talla de Segismundo (creador de la orden del Dragón), Vlad Dracul, los Bathory y los Cillei, fueron iniciados en estos ocultos y sombríos misterios.

En relación al tema de la antropofagia, cabe acotar asimismo que en viejas leyendas de Europa central y escitas, también se hablaba de vampiros que además de sangre, comían la carne de sus víctimas.

Tenemos luego que el vampiro sustenta su condición en este mundo, en el que elige mantenerse por motivos estratégicos, en vinculación con la radiación oscura del sol negro.

Es así como en su cripta o sarcófago,( tal como la serpiente se regenera mudando de piel) renueva indefinidamente su vitalidad y poder, fuera del alcance de la enfermedad, la vejez, y la muerte.

Este aspecto iniciático de la tumba o sarcófago ha sido captado incluso por actores que interpretaron a Dracula.

Bela Lugosi por ej, o Gary Oldman, durante el tiempo que llevó la producción de sus respectivos films, acostumbraban dormir en un sarcófago…

En el caso de Bela Lugosi, continuó luego con esa costumbre…

La clave esotérico/artística que evidencia como el vampiro (tipificado muy modernamente en la figura de Dracula) comprende toda la obra alquímica, es su misma indumentaria. Ya que el blanco de los colmillos , el rojo de la sangre, y la capa negra (a veces representada roja en su interior), son precisamente alusivos a los estados alquímicos de Nigredo, Albedo y Rubedo.

Aunque comunmente se hable de Rubedo como la etapa culminante de la alquimia, en la vía siniestra de la alquimia esto puede tener otro orden. Y así culminar la obra en Nigredo, atravesando la negrura infinita de Si Mismo.

Debe haberse ya captado la idea a esta altura, que el cuerpo inmortal del vampiro, pudiéndose mantener en este mundo indefinidamente, es análogo al inmortal cuerpo de Vajra, del que la tradición tántrica Kaula refiere.

Otra obra literaria digna de mención , es «Los perros de Tíndalos», de Frank Belknap, quien pertenecía asimismo al círculo de Lovecraft.

Los perros de Tíndalos son una extraña clase de perros vampíros , inmortales como tales, que habitan en los ángulos del tiempo (recordemos aquí el secreto del ángulo recto, y la intercepción de planos), pudiéndose trasladar a través de diferentes planos, ya que su condición les da poder sobre todo tiempo y espacio.

En obras posteriores son descritos a veces ya no como perros, sino con un aspecto más terrible y monstruoso, que evoca más bien al murciélago.

El propio Lovecraft hace mención a estos perros de Tíndalos en su obra «El que susurra en la oscuridad».

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Drácula y el secreto del vampiro

Por Christian C.

La figura del vampiro puede claramente encuadrarse en una filiación ofídica de la serpiente/dragón.

En algunos prototipos míticos del vampiro de otras culturas, por ej la clásica Lamia, o la Empusa (a menudo esta identificada con la Lamia) presentan una mezcla de fisonomía serpentiforme y humana.

En las tradiciones de medio oriente, y con claras raices sumerio-babilonias, Lilith ha pasado a ser considerada, por su rebeldia, carácter seductor y predador, la madre y reina de los vampiros. Y la consideración de Lilith como mujer serpiente se destaca en este sentido. Así también el legendario Cain, de quien se dice surge el linaje de los vampiros. Y Cain mismo ,según algunas fuentes, era «hijo de la serpiente». Por lo que el linaje vampírico de Cain, es el linaje de la serpiente.

Más allá de la distorsión religiosa hacia la antigua tradición vampírica, en general por parte de cultos solares , y la deformación literaria o del cine, los ancestrales símbolos y referentes vampíricos han perdurado en el inconsciente colectivo, tras una barrera de prohibiciones y tabues, que pocos logran atravesar.

El carácter depredador del vampiro, es claramente regido por el cerebro reptil. Y no puede dejarse de acotar, como las serpientes que coronan la cabeza de Medusa, bajo esta perspectiva pueden considerarse como ramificaciones o extensiones de poder del cerebro reptil (o «infernal») del que surgen.

La búsqueda de sangre por parte del vampiro, alude también a una energía preternatural , o sustancia supravital, que mediante determinado estado de conciencia, podía ser asimilada y metabolizada por el organismo, permitiendo una transmutación y regeneración indefinida de las celulas. La información biológica de las celulas sería modificada, adquiriendo un nuevo nivel vibratorio, deviniendo en un ser prácticamente inmortal.

Es curioso también como se mantenía en la antiguedad un ritual de beber en una copa, una mezcla alquímica de sangre y veneno de serpiente, con lo que se alcanzaba un estado de trance místico chamánico, suspendido entre la vida y la muerte (representadas respectivamente por la sangre y el veneno). Y esta mezcla o elixir infundía vitalidad, regeneración, y longevidad.

Así también el vampiro cuando atacaba a alguien, además de tomar su sangre, le daba a beber de la propia, deviniendo la víctima así en un nuevo vampiro, o un «no muerto», alguien que ha cruzado el umbral de la muerte, y por tanto mantiene dominio o poder del tiempo-espacio circundante. Recordemos en tal sentido, el cambio de forma que se atribuye a los vampiros (y a menudo en una forma ofídica), como murcielago, niebla, etc.

El vampiro en este sentido puede considerarse como el resultado de una mutación alquímica ,siendo una hibridación entre «humano y bestia», «angel y demonio».
Su mordida es interpretada en términos eróticos como «el beso de la serpiente», que es seguida luego de la serpentina mirada hipnótica ,y así como las alas membranosas del dragón,el vampiro evoca estas alas portando una capa de corte de ala de murcielago , siendo en ambos casos una alusión a las alas del «ángel rebelde»…. Y al igual que Lucifer, también el vampiro se opone y rechaza terminantemente la autoridad del Dios bíblico judeocristiano, lo que se pone de manifiesto en el abierto rechazo y repulsión de la luz solar y la cruz cristiana.

Puede trazarse cierto paralelo a este punto, con los Serafines (De la raiz Seraph o serpiente), que aunque representados posteriormente en el arte cristiano como ángeles celestiales alados, en sus orígenes, acorde a la tradición oculta, y la propia etimología, se trataba de serpientes voladoras igneas, muy similar a los dragones, y por cierto una clase de hibridación entre pájaro y serpiente.

E notorio asimismo como el murcielago no se conduce por medio de luz externa, sino un radar o medio de orientación propio,lo que traspolado a la figura vampírica, denota la independencia de la luz externa del mundo, y autosuficiencia. Por tal motivo, el vampiro no se refleja en el espejo, ya que no posee reflejo… Su reflejo, o «sombra» ha sido integrado en si mismo.

Todo esto queda también evidenciado en la combinación alquímica de la piel blanca del vampiro, la sangre roja, y su capa negra, teniendo aquí los tres colores de la obra alquímica.

El transitar del vampiro durante la noche presenta un doble significado : Por un lado el haber sido relegado y desplazado por la tradición «luminosa» dominante, a regiones ocultas de la psique, con la prohibición bajo amenazas de condena y castigos divinos, de acercarse a ese «tenebroso castillo» o región de las tinieblas….

Y por otro lado, el vampiro posee una integración y poder con las fuerzas oscuras, opuestas a la «luz del mundo visible dominante», obteniendo de la oscuridad la fuente de una «luz oscura» propia. De donde también entendemos que el vampiro se conecta con la fuente del sol negro.

La tumba o sarcófago en que descansa es bien claro una alusión a las antiguas criptas chamánicas y paganas subterráneas, donde en contacto con la energía oculta de la tierra, se producía una renovación energética completa.

Según algunos investigadores, los «sarcófagos» hermeticamente cerrados y sellados que se encontraron en las pirámides de Egipto, no eran tumbas como habitualmente se piensa, sino una suerte de cámaras iniciáticas, en que se producía una clase de «muerte, y retorno a la vida».

En las historias de vampiros bajo clara influencia cristiana, se sostiene que un vampiro puede ser matado clavándole una estaca en el corazón. El simbolismo subyacente detrás de esta leyenda, es que en oposición al aspecto o lado reptil, se busca atacar el lado emocional (el corazón). Más, lo cierto es que el vampiro ya ha «muerto» a todo lo anímico del mundo, y por tanto no puede ser afectado desde ese flanco.

Existe una antigua tradición hebrea, según la cual Jehová le confiere al ajo la propiedad de ser fatal para la serpiente.

Y encontramos en antiguas leyendas del folclore popular, que el vampiro repele el ajo, lo cual nos indica claramente cierto vínculo implícito entre el vampiro y la serpiente o el reptil.

En la obra de Dracula de Bram Stoker (ocultista iniciado en la Golden Dawn) , se desarrolla una trama en que Dracula (basado en el personaje histórico de Vlad Tepes) mantiene en su mismo nombre la clave de la serpiente/dragón, significando «Dracul» justamente dragón!

Su adherencia a un linaje gibelino y bogomilo en los Cárpatos, lo contextualiza en una marcada oposición al poder de la Iglesia romana.

El castillo aislado en que vive ,separado de la humanidad por una muralla, y del que lleva tierra a todo lugar que se traslade, así como su afición a la sangre, conforma una estructura arquemónica (suelo y sangre), basada en el principio del cerco, y manteniendo un espacio vital estratégico propio.

Un aspecto a destacar es como en distintas versiones de historias de vampiros, e incluso Dracula , el degustar la sangre permite acceder a las memorias de la víctima, e incluso el registro de sus ancestros.

A este respecto es notorio también el vínculo de Dracula con Minna , que bien se aprecia como un guiño a la Minne, o «memoria de sangre».

En la adaptación cinematográfica del Dracula de Francis Coppola, todo concluye cuando Minna decapita a Dracula. Argumento iniciático que se corresponde con la dama Kalibur decapitando al iniciado, y su retorno al Origen.

En el cuento The Reptile, de .John Burke (1966).,y llevado al cine, encontramos una mujer serpiente, que ha sido transformada en tal por un culto a la serpiente en Borneo.Mantiene una apariencia humana , y cada invierno cambia o muda de piel, exactamente como lo hace la serpiente. Ataca mediante mordidas con aspecto de reptil a los visitantes de su casa, donde reside con su padre, y las víctimas presentan la marca de una mordida de dos colmillos, como una cobra, y también como un vampiro….

En la película La guarida del gusano blanco (1988), adaptación libre de la última obra de Bram Stoker, se refiere un culto a una gigantesca serpiente/gusano Dionin, , que mora en una gruta subterránea. El culto es liderado por una sacerdotisa vampira, cuyas mordidas transmiten un veneno al sistema nervioso de la víctima, tornándolo también en un vampiro y adepto del culto.

Silvia Marsh además de su culto a Dionin, a quien ofrece víctimas humanas, siente fascinación por las serpientes, desde su contemplación, a jugar en forma solitaria al iniciático juego «Escaleras y serpientes».

Además es capaz de cambiar su piel a un color azulado, puede succionar el veneno de serpiente en una herida dado que ella misma posee en su sangre esa esencia serpentina, y mantiene un vínculo místico con Dionin, llegando a ser un canal o vehículo suyo.

Todo parece haber comenzado cuando de niña estuvo 10 dias en coma, tras haber sido mordida por una serpiente, tras lo cual accedió a esa dimensión de conciencia vampírica serpentina.

Un dato muy relevante, es que en cierta instancia en que dos de los personajes de la trama se hallan conversando, uno de ellos comenta como la palabra Worm (gusano) deriva de un término más antiguo, Wyrm, significando serpiente o dragón.

Pero la producción cinematográfica donde mejor se expone el vínculo entre los vampiros y los reptiles, es en la serie From Dusk till down (Del crepúsculo al amanecer), remake de una película con el mismo nombre dirigida por Quentin Tarantino, en que también se combinaba un culto vampírico con serpientes.

En la serie, más explicitamente, los vampiros, denominados «Culebra», están vinculados en su fisonomía a los reptiles, a diferencia de vampiros en otras partes del mundo, más allegados a los murcielagos o con otras características.

Este culto de los Culebra en la trama de la serie, se decían descendientes de los antiguos dioses mayas, cuya presencia y culto ofídico en dicha cultura es de todos bien conocido. Más allá del nexo mesoamericano con lo vampírico, lo cual puede discutirse , el punto a destacar aquí es como se suscita en el imaginario colectivo una trama donde la serpiente y el vampiro vuelven a cruzarse, ya que responden al mismo substrato simbólico en el trasfondo y más allá de tal o cual trama argumental.

Respecto a Vlad Tepes, en quien Bram Stoker dicen se basó para escribir su obra Dracula, tiene también algunos referentes que enlazan con lo iniciático, dada su adherencia a la orden del Dragón!

La cuestión planteada por Dacre Stoker, descendiente del célebre Bram Stoker, según su excelente libro Dracula.El origen, en cuanto que la figura literaria de Dracula tendría otro ascendente, es dejada aquí momentáneamente de lado, a los fines de este estudio , considerando el aspecto que bien puede enlazarse entre Vlad lll y su dinastía con el ámbito del vampirismo y lo draconiano, así como otras dinastías de renombre, que serán posteriormente citadas.

La orden del dragón ,fundada por Sigismundo de Luxemburgo, tenía el soporte de todo un linaje ofídico.

La casa de Luxemburgo se había unido con la casa de Lusignan, mediante el matrimonio de Marguerite de Enghein, y John de Luxemburgo.

La casa de Lusignan tiene como ascendente a la mujer serpiente/dragón Melusina, y de alli que este linaje ofídico se haya transmitido a través de esta dinastía, y luego extendido a la casa de Luxemburgo.

Esta orden del dragón, conocida también como la sociedad del dragón, y hermandad del dragón, tenía como propósito externo proteger el territorio de Hungria de las invasiones turcas, conformaba en su estructura interna una orden esotérica de magos y alquimistas.

Sus miembros portaban el emblema de la orden, un dragón curvado, similar a un Uroboros, con una cruz roja por encima. Más en un segundo grado de la orden, el emblema que portaban era solamente el dragón curvado, sin la cruz.

El miembro más famoso de esta orden fue Vlad lll, hijo de Vlad ll, quien también había pertenecido a la orden, adoptando el título de Dracul o dragón. De alli que su hijo, Vlad lll adoptase luego el título Dracula, hijo de Dracul, o hijo del dragón, conocido también como Vlad el empalador, debido a su forma terrible y temeraria de como enfrentaba a los invasores turcos.

A su vez Dracula pertenecía a la extraña familia Basarab, oriunda de las estepas de Eurasia, de un sitio conocido como Kipchak (término irani que deriva de Kip «cabello rojo o rubio», y Cha, escita. De modo que los integrantes de esta familia eran de cabello rubio o rojizo).

Los Basarab gobernaban Valaquia (hoy día parte de Rumania) y cierto límite con Transilvania, y se mantuvieron como una familia unida hasta la época de Vlad ll en que se dividen en dos ramas : La casa Danesti, y la casa Draculesti, asumiendo Vlad ll ,conocido para entonces como Drac, el rol del primer patriarca de la rama Draculesti.

Esta familia mantenía la costumbre de dormir durante el día, y llevar una vida activa nocturna. Algunos han supuesto que era debido a su piel y cabello extremadamente claros, que no iba en sintonía con el sol, debido a poca cantidad de melanina.

Pero más allá de su contextura biológica, guardaban un secreto alquímico de vitalidad y rejuvenecimiento, ya que era costumbre de sus miembros beber la sangre menstrual de una de las damas de su familia.

Considerando el carácter draconiano-ofídico de esta familia, podemos entender también que esta sangre portaba además inusuales propiedades alquímicas.

Y la prueba es la condición fuerte y saludable con que siempre se mantenían….

Por otro lado, cuando se despierta y desarrolla el poder ofídico, se obtienen poderes o facultades como la salida consciente en astral, el cambio de forma, o el traslado del propio cuerpo físico en forma espacial, lo que encuentra su reflejo en la leyenda de Dracula, que cambiaba de forma, y volaba como un murcielago.

Otra casa vinculada a menudo tanto con la casa Basarab como Lusignan, fue la casa Bathory, originada hacia el siglo X, con Vitus Bathory, de quien se decía había matado un dragón asestándole tres embestidas de su lanza. A raiz de este incidente legendario, el escudo de armas de los Bathory incluía como su pieza central tres dientes de dragón.
Se dice que Vitus Bathory asimiló el poder del dragón tras esta contienda, y que sus descendientes, tal como refiere Alexandre Bathory, poseían caracteres, o genes podríamos decir, draconianos.

Entre sus extraños rasgos, por ej, algunos de los miembros de esta dinastía poseían más dientes de lo común, e incluso más grupos de dientes….

También se dice muchos de ellos posesían habilidades psíquicas, el poder de sanar inmediatamente de cualquier herida, y matar enemigos a distancia.

Una famosa descendiente de la casa Bathory, es la famosa condesa sanguinaria, también asociada al ocultismo y prácticas oscuras, Erzebeth Bathory!

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Visión Hiperbórea de la cosmogonía de Lovecraft – Segunda parte –

Por Christian C.

La mención de Lovecraft de los «Elder Ones», ha sido indudablemente la puerta por la que escritores que continuaron desarrollando «Los mitos de Cthulhu», cayeron en desvirtuaciones de conceptos que Lovecraft nunca mencionó.

Más allá de la ya mencionada dualidad de » Great Old Ones» y «Elder Ones» que sistematizó August Derleth, con sucesivas ediciones y traducciones se creó más confusión al traducir «Elder Ones» indistintamente como Viejos Dioses, Antiguos, Los otros Dioses, y la más distorsionada traducción al español : Arquetípicos., Algo que ya en inglés, con la dualidad sistematizada por Derleth estaba implícito, pero traducido luego como «Dioses arquetípicos», dejó la huella delatando su marca sinárquica!

En efecto, estos escritores post-Lovecraft conciben a tales Dioses arquetípicos como los más poderosos, y el origen de todo, incluso de los Primigenios.

La confusión que esta cuestión generó, se puso de manifiesto luego en distintas explicaciones y versiones aportadas por diversos autores y escritores, tratando de ubicar y posicionar de un lado u otro a los llamados «Dioses arquetípicos».

Hay quienes incluso llegan a identificarlos confundiéndolos con los Antiguos (Old Ones) , precisamente debido a que en rigor de verdad, los Antiguos fueron en la cosmogonía lovecraftiana los primeros en llegar a este mundo.

Considerando específicamente el caso de los Antiguos o Primordiales, encontramos indicios del contexto en que arribaron a este mundo en el excelente relato «En las montañas de la locura».

Una importante acotación respecto a este relato , es que Lovecraft ubica el escenario en relación a unos arqueólogos que descubren muy asombradamente vestigios de aquellas ancestrales razas en la Antártida.

Considerando que los personajes arqueólogos no estaban en absoluto familiarizados con este lejano escenario primordial, debemos tener en cuenta las claves aquí y allá que Lovecraft nos va proporcionado a lo largo del relato., Más no cabe esperar por supuesto, dado que los personajes no eran iniciados hiperbóreos, una reconstrucción completa conforme a la Sabiduría Hiperbórea, sino indicios.

Por lo tanto, en los análisis y conclusiones de aquellos arqueólogos, se anticipa el abordaje a un hecho histórico donde las premisas culturales preeminentes condicional la elaboración de la historia como tal.

Así tenemos por un lado personajes que Lovecraft presenta como Viryas dormidos, los arqueólogos que no conocen nada de lo que están descubriendo, quedando pasmados de las indagaciones , y por tanto su aproximación a los descubrimientos es siempre desde un Presente Extensivo, o visión horizontal y frontal.

En tanto el propio Lovecraft, como Virya despierto, mantiene la perspectiva de IHPC (Iniciacio Hiperbóreo en Presente Comprensivo).

Teniendo en cuenta este principio, Lovecraft como iniciado y Virya despierto, refiere bajo el manto literario, profundas y antiguas verdades ya olvidadas, en una forma un tanto velada u oculta.

El pasaje aludido previamente en cuestión del relato «En las montañas de la locura», relativo a la llegada de los Antiguos a este mundo es el siguiente:

«Ya no podía caber duda ninguna acerca de la naturaleza de los seres que habían edificado esta monstruosa ciudad muerta y que habían vivido en ella hacia millones de años, cuando los antepasados del hombre eran mamíferos arcaicos y primitivos y cuando los gigantescos dinosaurios vagaban por las tropicales estepas de Europa y de Asia.»

Nótese la coexistencia de esta clase de mamíferos proto-humanos con los dinosaurios, lo cual condice con el registro de las controvertidas piedras de Ica, rechazadas por supuesto por la antropología sinárquica.

Estos antepasados del hombre, que eran «mamíferos arcaicos y primitivos» son evidentemente una alusión al Pasú., Y es que de hecho, Lovecraft menciona que los Primordiales llegan a un mundo ya formado, en el que continúan una facción de ellos (los Siddhas traidores) haciendo sus propios aportes:

«Ellos fueron sin duda los que crearon y esclavizaron esa vida y los modelos en que se basaban los pérfidos mitos primigenios que se insinúan temerosamente en los Manuscritos Pnakóticos y en el Necronomicón. Eran los Primordiales que habían bajado de las estrellas cuando la Tierra era joven —los seres cuya sustancia había modelado una extraña evolución y cuyos poderes eran mayores de los que jamás habían existido en este planeta.»

Aquí se menciona claramente que algunos antiguos «crearon y esclavizaron» cierta forma de vida, lo cual permite atisbar un indicio de la clave genética operada por los Siddhas traidores, situación que permitió como sabemos, la mutación del Pasú en Virya, con el aporte genético extraterrestre.

Lovecraft también brinda atisbos de dos grupos de estos Antiguos o Primordiales, cuando refiere que un grupo permaneció en el ámbito marino, en las profundidades, en tanto otro grupo se desplazo hacia la tierra.

Al mismo tiempo, como sabemos , en la modificación del designio demiúrgico del Pasú, mediante la intercepción y modulación del logos solar demiúrgico entre el sol y la Tierra, mediante el sistema conocido como Kalachacra, aquellos Siddhas produjeron una desestabilización en las condiciones terrestres y de la psicoesfera, lo cual devino en la manifestación de nuevas matrices arquetípicas, con formas de vida biológica no conocidas hasta entonces.

El relato de Lovecraft prosigue al respecto :

«No empleaban ayuda externa alguna para la locomoción personal, pues los Primordiales, tanto en la tierra como en el aire y en el agua, parecían poseer posibilidades de moverse a enorme velocidad. Las cargas, sin embargo, las arrastraban bestias de tiro: los shogoths bajo el agua y una curiosa variedad de vertebrados primitivos en los años posteriores de existencia terrestre.

Estos vertebrados, así como otras infinitas formas de vida —animal y vegetal, marina, terrestre y aérea—, eran producto de una evolución no dirigida de células vivas creadas por los Primordiales, pero cuyo desarrollo quedaba fuera del radio de su atención. Se les había permitido desarrollarse libremente porque no habían provocado conflictos a los seres dominantes. Las formas evolucionadas que resultaban inconvenientes se exterminaban mecánicamente. «

Tras el enfrentamiento con diversas razas cósmicas ya mencionadas en la primera parte , los Antiguos desparecen del escenario visible, retirándose sea en las profundidades marinas, o en alguna morada bajo el mundo terrestre, lo cual remite a la morada intraterrena de Agartha de los Siddhas.

No puede por otra parte, catalogarse el enfrentamiento de los Antiguos con los Primigenios, como siendo estos últimos demiúrgicos, ya que se aprecia en el caso de los Primigenios la hostilidad al mundo como tal., A tal punto, que su liberación bajo los sellos mágicos en que se hallan, y posterior emergencia, arrasaría prácticamente el mundo como se conoce.

Tal predisposición destructora, sería una interferencia para el Demiurgo, ya que se estaría obstaculizando el desarrollo evolutivo entelequial hasta el Maha-Pralaya.

No queda claro la razón del aprisionamiento de los Primigenios, y así es como, distintos autores post-Lovecraft presentan distintas teorías, algunas de las cuales suman más confusión.

Así es como se dice desvirtuadamente, que los Primigenios se hallaban originalmente integrados en los Dioses mayores o «arquetípicos» (teoría de Lin Carter), y que tras una rebelión liderada por Yog Sothoth y Ubho Sathla, robando unas tablas de conocimiento oculto, se habrían separado, alejando la Tierra a unas nuevas coordenadas espacio-temporales.

A partir de allí se habría desencadenado una guerra entre estos Dioses mayores («arquetípicos») y los Primigenios, siendo finalmente estos capturados y sellados.

La mención de cultos mencionados por Lovecraft de la más diversa índole alrededor de los Primigenios procurando liberarlos, ha contribuido también al error de catalogarlos como demiúrgicos.

Más, el hecho que se forme un culto de la índole que fuere alrededor de un Primigenio, no es razón para confundir al Primigenio en si como demiúrgico.

Baste el ejemplo de Kali y Shiva en la India, divinidades hiperbóreas, alrededor de quienes se han formado toda clase de cultos, muchos de ellos alejados de las ancestrales verdades hiperbóreas.

En rigor de verdad, con excepción de la tradición Kaula, prácticamente todas las demás corrientes y sectas de shaivas y shaktas, mantienen en mayor o menor grado cierta confusión estratégica.

Por otra parte , la expansión en el mundo de los Primigenios, no se ajusta en modo alguno al desarrollo entelequial conforme al designio racial de los Manús, siendo de hecho que en tal concepción demiúrgica, el hombre es el centro de la creación.

En tanto que para los Primigenios, el hombre es algo insignificante y sin valor alguno.

Según otra teoría, aquellos Dioses mayores/arquetípicos nacieron cuando los Primigenios dormían, y tras llegar a este mundo y descubrirlos, se apresuraron horrorizados en sellarlos.

Ese antagonismo que se nota como producto de horror, por parte de los «arquetípicos» hacia los Primigenios ,nos indica también que los Primigenios no se hallan en sintonía con el plan arquetípico demiúrgico.

Una tercer teoría sugiere que los Primigenios simplemente «hibernan» o «duermen», para en su momento, con la correspondiente alineación astronómica, volver a resurgir.
No obstante, aquí también se está supeditando aquella raza de Primigenios, a consideraciones astronómicas, y en consecuencia arquetípico-demiúrgicas.

La opinión más plausible, es la de que los Primigenios fueron encerrados de hecho por los mismos Antiguos, para conforme a determinada estrategia guerrera, aprovechar la furia y horror ancestral que aquellos seres monstruosos desplegarán cuando sean desencadenados, arrasando con todo en oposición al mundo demiúrgico.

Cabe acotar nuevamente, que Lovecraft no especificó mucho estas categorías que fueron desarrolladas posteriormente, ya que simplemente utilizó los términos «Old ones» con relación a los Primordiales de la Antártida, y «Great old ones» con relación a una variedad de razas y seres de inmenso poder.

No obstante esto se aprecia por ej . que dada la ambiguedad de dichos términos, en «El horror de Dunwich» al menos una vez Lovecraft utiliza el término «Old ones» o «Antiguos» con alusión a Yog-Sothoth y sus allegados, considerados por lo general como Primigenios (Great old ones).

Y del mismo modo su relato «En las montañas de la locura» presenta asimismo una mención de «Great Old Ones» respecto a los Antiguos de la Antártida (Old ones), todo lo cual sugiere que Lovecraft estaba indicando en una forma un tanto velada , algún nexo o tipo de alianza entre aquellos Antiguos/Primordiales y algunos Primigenios.

Acuerdo que pudo haberse establecido luego de numerosas batallas entre ambos bandos.

No queda tampoco claro el origen de tales Primigenios, más si de su esencia de fuerza caótica monstruosa. Hay quienes susurran por lo bajo, como si de un viejo secreto se tratase, que los Primigenios proceden de otros mundos inimaginables, siendo anteriores al mismo Demiurgo de este mundo, o más precisamente, anteriores al escenario demiúrgico aquí montado.

De cualquier modo, tal cuestión no encuentra su razón en este mundo, sino en el caos primordial, allende el mundo demiúrgico.

Dada la esencia intrínsecamente guerrera de estos seres, tanto de los Antiguos como los Primigenios, y en oposición a este mundo, podemos vislumbrar que a modo de «lila» o juego/pasatiempo de Dioses, se suscitó una contienda entre ciertos grupos, que se remonta fuera y más allá del presente universo.

Tal posibilidad es análoga a lo esbozado en Fundamentos de la Sabiduría Hiperbórea por Nimrod de Rosario, cuando menciona lo siguiente:

«…los Espíritus Hiperbóreos, cuya naturaleza es hostil al orden material del Demiurgo, ingresaron al Universo por una puerta cósmica conocida en los Misterios como “Puerta de Venus”.

¿Porqué lo hicieron? Es parte del Misterio, pero algunos han supuesto que venían de perder una guerra cósmica en otros universos inimaginables… «

Al mismo tiempo, debe considerarse que en la variedad de razas cósmicas e hiper-dimensionales mencionadas por Lovecraft, algunos son efectivamente demiúrgicos y arquetípicos.., Más otros se hallan infiltrados en el mundo del Demiurgo, habiendo en algunos casos entrado a este universo a través de boquetes dimensionales, con determinados objetivos específicos, como combatir a otras razas, generar caos en este mundo, llevar mediante alguna estrategia otras razas perdidas hacia la liberación, o utilizarlos conforme a sus planificaciones, etc.

La raza conocida como «los hongos de Yuggoth» (Plutón) o Mi-Go (de quienes se dice estuvieron en guerra tanto con los Primigenios como con los Antiguos) a veces se refiere que han perdido el rastro o memoria de su propia historia y origen… lo cual no deja de ser significativo…

La aclaración es importante, ya que un Virya incauto podría perderse en las misteriosas «Tierras del sueño», con toda su variedad de extraños seres, o incluso en la morada submarina de los Profundos (Deep Ones), si no se posee la debida orientación.

Es la propia Minne, conforme a la pureza de sangre y el grado de orientación estratétgica, la que permite dilucidar al Virya cada caso en particular.

Concretamente en los casos de Yog Sothoth y Azathoth, así como Nyarlatothep, se hallan, no como otras razas o seres alienígenas poderosos dentro de este mundo, sino más allá del tiempo y espacio. De Azathoth se dice que mora en el centro del caos infinito….

De modo que no sería apropiado catalogarlos como una más de las tantas razas cósmicas, sino más bien extra-cósmica, o extra-universal.

Esta condición extra-universal de tales seres o Dioses, les ha valido ser catalogados apartadamente por los autores post-Lovecraft como «Dioses exteriores».

Es importante resaltar la relevancia de estos Dioses (Azathoth, Yog-Sothoth…), más allá del mundo conocido y desconocido, ya que se hallan por sobre toda manifestación de otras razas y seres (incluyendo los otros Primigenios).

Azathoth está vinculado directamente al » Caos Infinito», lo cual remite fuera de este mundo.

Azathoth no es un ser o entidad definida como otros Dioses de la cosmogonía lovecraftiana. Dados sus atributos, se halla en el centro del caos infinito, desde donde irradia o motoriza la fuerza del caos primordial.

Su mismo nombre oculta etimológicamente el «Azoth» o componente secreto de la alquimia, necesario para operar la transmutación.

Se dice que es el » caos monstruoso más allá del espacio angular», lo cual remite a lo que esotéricamente se considera como la fuente del caos, en oposición a lo arquetípico de este mundo. Es decir, el Sol Negro!

Su mismo epíteto de «antítesis de la creación», condice en tal sentido, siendo también llamado desde el lado sinárquico, y con razón » Sultán de los demonios», o » Sultán del caos».

Es de hecho, el motor del caos, lo cual debe entenderse como la dimanación de fuerza que se opone al orden arquetípico.

Cabe esperar, con todo lo mencionado respecto a Azathoth ,el odio shambálico y sinárquico, que se ha puesto de manifiesto en los despectivos apelativos de » Dios idiota», o sin inteligencia.

Desde ya, bajo los parámetros demiúrgicos y arquetípicos limitantes, la » inteligencia» es concebida únicamente en términos arquetípicos, siendo de hecho uno de los aspectos del Uno. De allí, que sea inconcebible para los arcontes demiúrgicos y shambálicos algo que se halle » fuera» de esa inteligencia demiúrgica, tildándolo de «idiota».

Del mismo modo » el Dios ciego», ya que » no mira hacia el mundo», y como sol negro, fuente de infinita radiación oscura, no puede nunca manifestarse en su esencia y radiación la luz demiúrgica, lo que se ha interpretado shambálica y sinárquicamemte como que » no ve la luz del Uno», o lo que es lo mismo, » ciego».

Los «tentáculos» de que se rodea, con los cuales puede destruir todo, son una figuración de los rayos del sol negro.

Del mismo modo, la caricaturización como » el que roe, gime y babea, desde el centro del vacío», en alusión a su expansión de la llama oscura, fuente del Vril.

As también a veces es representado como poseyendo innumerables ojos y fauces, lo cual es una figuración de su inmenso alcance, y la infinita fuerza devoradora de todo lo creado.

Se dice en el mito que se halla rodeado de una corte de músicos flautistas, que mediante su música le mantienen dormido.

La verdad gnóstica tras esta figuración mítica es el canto carismático de los Siddhas que acompañan a Lucifer, que resuena en la sangre de los Viryas.

Se halla fuera de la realidad del mundo, al mismo tiempo que irradia su influencia allí, desde el sueño místico en que se halla.

Su despertar acarrearía la destrucción del mundo.

En su primera versión de la novela iniciática, titulada «La extraña aventura del Dr. Arturo Siegnagel», Nimrod de Rosario comenta en una breve introducción inicial : «Clamarás ayuda a nuestro Dios Serpiente Cristo-Lucifer. Pero el duerme para despertar al final del Kali Yuga…».

Traspolando esta concepción hiperbórea al mito de Azathoth, ya conceptualizado como «sol negro» (expresión del propio Lucifer), resulta también equivalente su condición durmiente en la instancia presente.

Uno de los más próximos o cercanos a Azathoth, es Yog-Sothoth, de quien se dice en «El horror de Dunwich»:

«Yog-Sothoth conoce la puerta. Yog-Sothoth es la puerta.

Yog-Sothoth es la llave y el guardián de la puerta. Pasado, presente y futuro, todo es uno en YogSothoth.

Él sabe por dónde entraron los Grandes Antiguos en el pasado, y por donde volverán a irrumpir otra vez. «

Entre los Primigenios asimismo, aparece Cthulhu ,que también se halla durmiendo.

Precisamente, respecto a Cthulhu se dice : «No está muerto lo que puede yacer eternamente, y con el paso de extraños eones, incluso la muerte puede morir».

Este despertar o resurgimiento de Cthulhu ,según la frase citada, se halla conectado con la idea de «vencer la imposición de la muerte», o lo que es lo mismo, lograr la inmortalidad.

Desde la limitada consideración humana, propia de los Viryas perdidos, la condición de Cthulhu en su estado durmiente es catalogada como muerte. Más en rigor de verdad, esto es únicamente en un sentido figurativo. En todo caso, Cthulhu mora en la muerte, siendo inmortal.

Desde esa consideración se comprende la antigua leyenda que dice Ph’nglui mglw’nafh Cthulhu R’lyeh wgah’nagl fhtagn , que significa «En su morada de R’lyeh, el muerto Cthulhu espera soñando»

De modo que puede leerse entre líneas, que tal retorno de Cthulhu sería de hecho opuesto al cautiverio del ciclo de vida y muerte que rige el Demiurgo y sus Arcontes.
También resulta muy significativa la referencia que aparece en el relato «El montículo», donde se comenta que en cavernas de una morada subterránea se hallan retratados Cthulhu y Yig, mirándose uno al otro.

Y es que, desde la Sabiduría Hiperbórea, el contexto alusivo a la serpiente y el pulpo, remite precisamente al Origen. De allí el lugar destacado que les diera Lovecraft.

También Cthulhu representa en cada Virya un poder oculto sumergido en las profundidades, que debe ser liberado, siendo R’lyeh, la morada de Cthulhu, el inconsciente colectivo, donde se halla oculto tras todo un entramado arquetípico el poder primordial. Es decir, el poder del cerebro reptil, o Arquícefalo!

Resulta interesante que conforme a la Sabiduría Hiperbórea, la constelación del pulpo regirá el cielo estelar durante la batalla final, desde el hemisferio sur ( la Antártida, asentamiento según refiere Lovecraft de los Antiguos).

Nimrod de Rosario menciona en Fundamentos de la Sabiduría Hiperbórea, en el artículo «El Mito y el símbolo sagrado», al Dios pez, o Dagón, Dios que es mencionado también en la cosmogonía lovecraftiana.

Dagón , en la explicación brindada por Nimrod de Rosario, es mencionado vinculándose a un símbolo sagrado arquetípico.

Por otra parte también se nos refiere en otra parte de la citada obra de Nimrod, que el pez representa al Pasú y su historia evolutiva.

Lo que cabe destacar en tal sentido, es que en el mito lovecraftiano, Dagon (símbolo sagrado arquetípico) se halla supeditado a Cthulhu, quien representa el poder antiguo primigenio.

A veces se sugiere, en el contexto de los seres denominados Profundos, o extraños híbridos de hombres-pez, que tienen como Dioses a una tríada conformada por Cthulhu, Hydra y Dagón. Lo cierto es que Cthulhu mantiene la supremacía, lo que en términos hiperbóreo-gnósticos indica que el aspecto monádico del Pasú resulta subordinado y dominado por un poder, también de las profundidades al igual que el pez, pero propio del espíritu.

Respecto a los Profundos puede apreciarse así una doble condición. Por un lado el encuadre arquetípico del hombre-pez, más por otro lado, Lovecraft da indicios del real alcance del mismo nombre «Profundos», indicando que sumergiéndose en profundidades abismales, es posible para ellos alcanzar la liberación.

Así, en «La sombra sobre Insmouth » se dice lo siguiente: «…nos sumergiremos en los negros abismos hasta la ciclópea Y’hanthlei,la de las mil columnas. Y allí, en compañía de los Profundos, viviremos por siempre en un mundo de maravilla y de gloria.»

Consideremos en términos gnósticos la cuestión iniciática de «sumergirse en la negrura abismal», para así arribar a la morada de «las mil columnas», figuración también de «los hombres de piedra».

Y así como existe una vinculación carismática entre un Siddha y cierto grupo de Viryas, de igual modo tenemos la figura de Cthulhu, en derredor de quien se hallan vínculados carismáticamente los Profundos, exactamente como un pulpo con sus tentáculos!

En el caso de Nyarlathotep, como mensajero de Azathoth, y asumiendo diversas máscaras o avatares para su manifestación en este mundo, ha de resaltarse su significativo epíteto de «El caos reptante», lo cual enlaza precisamente al caos primordial con lo reptílico.

Y tanto en el caso de Yog-Sothoth («la puerta», «la llave», y «El guardian de la puerta»), como Nyarlathotep (mensajero de Azathoth), entendemos que ambos son referidos como representativos de la puerta a la Gnosis oculta.

Luego tenemos el caso de Shub Niggurath , «la cabra negra de los bosques, de los diez mil retoños», que remite en su significado gnóstico al ancestral aspecto de sexualidad, tan vinculado a la cabra, que debe ser resignado y trascendido.

Se dice que la cabra negra posee órganos tanto masculinos como femeninos, lo que engloba precisamente la sexualidad en general., Su nombre, «Niggurath» remite en latín a Niger o Nigrum, es decir negro, siendo así «la cabra negra».

Al igual que en el caso de Azathoth, del cual se deriva en forma etimológica y encriptada el «Azoth» de la alquimia, aquí tenemos tanto la fase alquímica de Nigredo, como la oscuridad que todo Virya debe traspasar.

Y es que según los mitos de Shub Niggurath, aquellos devorados por la cabra negra, resurgen nuevamente de ella, como «renacidos», pero siendo ahora sus «retoños oscuros» ,o lo que es igual «hijos de la oscuridad primigenia».

De modo que, en todos los casos citados, debe irse más allá del velo literario y el mito como tal, atendiendo a su significado gnóstico oculto.

Es así como H.P. Lovecraft ha vertido numerosas claves iniciáticas en sus relatos. Por ej, uno de sus cuentos se titula «El hombre de piedra».

Y más allá del argumento o contenido del cuento, el propio título ya es de por si una clave.

Con relación a la cuestión de la intimidad sexual previamente referida a Shub Niggurath, cabe acotar que algunos ocultistas han expresado experiencias de este tipo, incluso con Cthulhu, sea a través de «sueños», experiencias astrales ,o bajo estados alternativos de conciencia, a menudo inducidos por enteógenos.

Kenneth Grant en «La fuente de Hecate» refiere el caso de sacerdotisas que siendo ellas mismas una clase de «portal» hacia otros planos dimensionales, han experimentado vínculo sexual con seres lovecraftianos como los Profundos.

En estos casos en que se obtienen por dicho contacto extraños siddhis o poderes místicos, cuando no una clase de transmutación, es precisamente el aspecto o componente reptil el que produce tales cambios, y desde ese aspecto reptiloide los kalas de tales seres.

Tal tipo de contacto y transmutación debe encuadrarse necesariamente en la vía tántrica húmeda de mano izquierda (que incluye una amplia variedad de técnicas y operatividad tántrica), siendo de hecho, una de las siete más una vías de liberación!

Como corolario del presente escrito, tenemos un relato basado en una carta de Lovecraft a Donald Wandrei en 1927, que aporta una interesante y muy valiosa clave respecto a la situación del Virya que ha despertado, más debe reorientarse para recuperar el Origen perdido.

Así, bajo una metáfora literaria, el mismo Lovecraft se presenta figurativamente como personaje del cuento, expresando una situación que todo Virya orientado sabrá comprender:

«Mi nombre es Howard Phillips, mi casa está situada en College Street 66, Providence, Rhode Island, ignoro en que fecha estamos pero recuerdo que el 27 de Noviembre de 1927 me quedé dormido y tuve un sueño, y desde entonces no he conseguido despertar» El ser bajo la luz de la luna.

La fecha esbozada (27 de noviembre de 1927), sin descartar algún significado numerológico oculto, es un símil o alegoría del reconocimiento de un origen del Yo, que no es de este mundo. Más a partir de tal reconocimiento innato del Virya, hace falta la orientación para así «despertar» , o, liberarse de este mundo-sueño del Demiurgo.

Un comentario

Visión hiperbórea de la cosmogonía de Lovecraft

Por Christian C.

Howard Phillips Lovecraft menciona a lo largo de toda su obra literaria diferentes entidades extradimensionales y alienígenas, con distintas características, tales como los Antiguos, los Primigenios, los Profundos, etc.

Aunque a menudo son confundidos por el lector inexperto o no familiarizado con la obra de Lovecraft, los ejemplos mencionados se mantienen como categorías diferentes.

Un buen libro orientativo al respecto es «En las montañas de la locura», donde Lovecraft menciona aquellos seres que proviniendo del espacio exterior, habitaron la Tierra en remotos tiempos.

Se dice asi, que los llamados «Old Ones», ( traducidos a veces como Antiguos, Primordiales, o Ancianos) llegaron a la Tierra en el período conocido oficialmente como Neoproterozoico.

También son referidos en ocasiones como «Elder things», traduciéndose del mismo modo como «los Primordiales».

Su fisonomía semeja una forma de tipo cilíndrica,con una cabeza vista por encima como una estrella de mar, con un ojo en cada extensión.

Se dice que poseen 5 lóbulos cerebrales., Así también 4 tentáculos en su base, que utilizan para prolongarse, y otras prolongaciones en la parte media utilizadas a modo de brazos.

Poseen también alas, y su hábitat responde al modo de vida anfibio, reproduciéndose por bipartición, con la capacidad para descomponer materia y alimentarse, pese a tener preferencia por la carne.

Los Antiguos /Primordiales se dice que crearon mediante ingeniería genética otra clase de seres como servidores, los Shoggoth, quienes les asistieron en la edificación de numerosas ciudades, de las cuales se refiere que actualmente solo se hallan las ruinas de una de ellas, en la Antártida.

De los Shoggoth se dice que tienen la apariencia de una masa informe protoplasmática, en forma de búrbujas que presentan ojos y fauces, apareciendo y desapareciendo continuamente.

Con el tiempo, los Shoggoth se revelaron contra los Antiguos, quienes además recibieron el ataque de otras razas procedentes del exterior, tales como los Primigenios («The Great Old Ones», que no deben ser confundidos con los Antiguos mencionados previamente).
Se destaca entre los Primigenios a Cthulhu y sus retoños, conocidos como «la semilla estelar de Cthulhu», ser alado de aspecto gigantesco similar al pulpo, y rasgos draconianos.

Entre los primigenios, Lovecraft menciona a lo largo de su obra en distintas historias, unos 7 principales: Azathoth, Yog-Sothoth, Shub Niggurath, Nyarlathotep, Cthulhu, Yig , y Dagon.

Algunos estudiosos y ocultistas han propuesto correspondencias de estos seres extradimensionales con Dios sumerios.

Además de la rebelión de los Shoggoth, y el ataque y confrontación con los Primigenios, los Antiguos también tuvieron que enfrentar la raza Mi-Go, conocidos por su fisonomía como «los hongos de Yuggoth» (siendo una cruza de hongo y animal), identificándose Yuggoth como Plutón, y también la raza de Yith, o Yithianos.

Cabe destacar que el aspecto monstruoso de los Primigenios, es notoriamente distinto del de los Antiguos con cabeza en forma de estrella.

En el caso de los Primigenios, su aspecto es de tipo monstruoso e inhumano.

No obstante la diferencia apuntada entre ambos grupos, el término «Antiguo» resulta muy ambiguo, por lo que también tenemos una mención de Lovecraft en su cuento «El horror de Dunwich» respecto a Yog-Sothoth y sus allegados como «Antiguos» o «Ancianos», dependiendo de la traducción, siendo nuevamente el términ en inglés «Old Ones».

Excepto en el caso citado, en otras historias Lovecraft se refiere a estas entidades como «The Great Old Ones», que se ha traducido como «Primigenios», distinguiéndose así de los Antiguos de la Antártida ya mencionados.

Este apelativo de «Primigenios» o «The great old ones», Lovecraft lo utiliza a veces también para otros seres alienígenas y extraños, como los Mi-Go, o los habitantes de K´nian.

Tampoco deben confundirse con los Profundos (Deep Ones), híbridos de humano y pez, o una clase de «hombres pez», como aparecen en «La sombra sobre Insmouth».

Un término utilizado por Lovecraft que ha sido malinterpretado, dependiendo de las distintas traducciones efectuadas, es «Elder Gods».

Traduciéndolo en forma textual sería «Dioses mayores»., Más ha sido traducido en forma muy variada también como «Antiguos», «Los otros Dioses» (no confundir con un cuento de Lovecraft que lleva este título), y extraña y solamente en español, como «Arquetípicos».

La confusión no termina aquí, sino que August Derleth, quien pertenecía al «círculo de Lovecraft», distorsionó un tanto los conceptos, estableciendo que estos «Elder Gods» o «Elder ones» eran Dioses buenos, en contraposición a los Primigenios (Great old Ones) catalogándolos como malévolos.

Este esquema, más comprensible a la mentalidad occidental judeocristiana, en una analogía literaria que evoca la lucha de «ángeles y demonios», no aparece nunca en la obra de Lovecraft, estando los Primigenios más allá de las categorías moralmente conocidas en este mundo de bien y mal.

Siendo Nyarlatothep el emisario de los Primigenios, y principalmente de Yog Sothoth, se aprecia que mantenía cierta disonancia con respecto a Nodens, «Elder God», mencionado por Lovecraft como «Gran señor del abismo».

Estos Dioses mayores o «Elder Gods», entre los que se menciona a Nodens, protegían a los Dioses gobernantes de «las tierras del sueño», Dioses conocidos como «Great Gods», o «Grandes Dioses».

Más, el hecho o mención que hubiera unos Dioses mayores, y no formaban parte del grupo de Nyarlatothep, llevó a Derleth a elaborar la idea que tales Dioses debían ser opuestos a los Primigenios, y bajo esa visión dualista, unos eran buenos y los otros malos.

A esto se suma la ya mencionada traducción al español de los «Elder Gods» como Dioses Arquetípicos, algo que Lovecraft nunca mencionó!

Las desvirtuaciones no terminan allí, sino que Derleth luego elaboró también el concepto de los «Primigenios elementales», donde los Primigenios estaban asociados cada uno a un elemento de la naturaleza. Por ej. Cthulhu, al agua; Cthugha, al fuego; Ithaqua, al aire, etc.

Posteriormente, y años más tarde, en el juego de rol La llamada de Cthulhu, aparecen los Dioses exteriores (Outer Gods), marcando una diferencia con de ciertos Primigenios mayores (Concretamente Azathoth, Yog-Sothoth, Shub Niggurath, y Nyarlatothep), con respecto a otros primigenios ,como Cthulhu, o Yig por ej. Más debe aclararse que Lovecraft jamás hizo tampoco esta distinción.

El concepto de «Dioses exteriores» pudo haberse derivado a partir de una reinterpretación del relato «Los otros Dioses» de Lovecraft, relato donde el sabio Barzai pretende espiar a los Grandes Dioses o Dioses terrenales , debido a lo cual es castigado por «los otros Dioses» ,llamados también «los Dioses de los infiernos exteriores», de donde se derivó el apelativo de Dioses exteriores, asociándolos con Azathoth, Yog-Sothoth, Shub Niggurath, y Nyarlatothep, más allá del mundo conocido., De alli que se les denomine «los Dioses exteriores».

Estos Dioses exteriores no deben ser confundidos con los seres exteriores («outer beings» o «outer ones») mencionados por Lovecraft en «El que susurra en la oscuridad», donde tal denominación se aplica a los seres denominados Mi-Go, que han interactuado de hecho con la raza humana.

En tanto que según la clasificación apuntada de Dioses exteriores, su sola visión produce la locura o muerte inmediata. (Con la posible excepción de Nyarlathotep como emisario,que se ha expresado en el mundo mediante distintos avatares).

Como puede apreciarse, existe en el original en idioma inglés, una variedad de términos similares que Lovecraft utiliza (Old Ones, Great Old Ones, Deep Ones, Great Ones, Elder Ones, Outer ones), pero referidos a distintas entidades, razas y seres de otros mundos.

Si bien August Derleth, así como Donald Wandrei, contribuyeron en suma manera luego del fallecimiento de Lovecraft a la difusión de sus escritos, mediante la editorial Arkham House, también es un hecho que dieron un giro al enfoque lovecraftiano mantenido hasta el momento, reinterpretando y exponiendo su cosmogonía en una forma que no cuadra a lo escrito y expuesto por Lovecraft.

Ese dualismo eventualmente fue atenuado por el propio Derleth tiempo después, ya que terminó adjudicando una categoría «benéfica» a algunos Primigenios, en sus propios cuentos.

No obstante esto, esa visión de bien y mal en relación a la humanidad por parte de los Primigenios nunca fue expuesta o desarrollada por Lovecraft.

Similarmente, la captura o encierro de los Primigenios bajo determinados sellos mágicos, fue atribuido por Derleth, y otros como Lyn Carter, a los «Arquetípicos», cuestión y concepto tampoco expuesto por Lovecraft.

La discrepancia de opiniones respecto a este punto, llevó a que algunos considerasen incluso, que fueron los Antiguos quienes aprisionaron a los Primigenios (debido a algún tipo de falta no explicada), en tanto otros han considerado que los Primigenos simplemente «duermen ,para en su momento despertar nuevamente, y continuar la batalla cósmica.

No sabemos hasta que punto escritores como Derleth , Carter o Wandrei actuaron por innovación propia, pretendiendo aportar sus respectivas contribuciones a los «Mitos de Cthulhu», o hubo quizá algún interés e injerencia sinárquica, para desvirtuar y degradar la mitología y cosmogonía lovecraftiana, que podía eventualmente revelar verdades metafísicas peligrosas, así como la orientación de los Viryas al Origen.

Particularmente si consideramos el realce reptílico que Lovecraft nos brinda en algunos de sus relatos.

Debe aclararse asimismo el malentendido en cuanto que Cthulhu es el Demiurgo., La cuestión es tan simple, como que Cthulhu no es un Dios creador, ni tampoco tiene completo poder sobre este mundo ,habiendo sido de hecho sellado, hasta la instancia en que sea liberado nuevamente.

Estos atributos no condicen con el Demiurgo ,de quien se dice es el creador de este mundo, y sobre el que posee plena omnipotencia.

Si hubiera que referir un creador en la cosmogonía lovecraftiana, puede decirse que Azathoth es el origen de todo cuanto existe en este mundo, pero tampoco resulta del todo claro o preciso.

Este es el problema que se suscita cuando se comparan cosmogonías, mitologías, y diferentes corrientes, ya que aunque aparecen conceptos equivalentes, nunca hay equivalencias exactas.

Esto se debe a que estas diferentes mitologías han sido sistematizadas en distintas culturas desde variados grados de impureza de sangre,lo cual les ha posibilitado reflejar en sus mitos verdades metafísicas arquetípicas únicamente desde el recorte de un aspecto tajada. (Es decir su aproximación a los arquetípos demiúrgicos, extrayendo alguna verdad parcial en términos de los Dioses y Mitos que tales arquetipos connotan).

Y por supuesto (Y aquí hay una importante cuestión) mucha menor capacidad para captar la realidad de Dioses provenientes de fuera de este mundo. La aproximación del Virya perdido es en tal sentido siempre horizontal en Presente Extensivo.

De modo que la irrupción de Dioses procedentes de más allá de este mundo, es recepcionada y codificada en los mitos culturales bajo parametros arquetípicos, obteniendo así una pálida sombra conceptual de lo real.

Así tenemos por un lado a Azathoth en el Mythos como «El Dios ciego» y que se halla dormido en relación al resto del mundo.

Más, considerando por otra parte a Azathoth como un Dios oscuro, que porta la esencia oscura del «Sol negro», genera la irrupción y caos respecto al mundo, en oposición a las fuerzas demiúrgicas.

De hecho , y en rigor técnico, dada su oposición al mundo desde el caos primordial oscuro, algunos ocultistas lo han considerado precisamente en términos gnósticos, como un «Anti-Demiurgo», y en tal sentido sería «el origen de todo» desde una consideración más profunda,en cuanto a su influencia y expansión caótica, que se difumina y superpone a todas partes desde el caos , en el cual quiere hacer al mundo sucumbir y desaparecer.

Su condición de «ciego», no sería en consecuencia sino una metáfora críptica , respecto a que «no mira a este mundo poniendo sentido en los entes», sino que mantiene la hostilidad esencial.

En «El que susurra en la oscuridad» Lovecraft se refiere a Azathoth como «horripilante caos nuclear existente allende el espacio angular».

Lin Carter, continuando con las tergiversaciones de Derleth, atribuye a los llamados hoy día «Arquetípicos» el origen de la vida, sosteniendo incluso que fueron ellos quienes creador a Azatoth y a Ubbo Sathla,los cuales habrían dado origen a todo lo demás, concepto clara y netamente demiúrgico, ya que se ubica a estos «Arquetípicos» como la fuente última de todo.

En todo caso, si nos remitimos al propio Lovecraft, en su obra «En las montañas de la locura», se comenta sobre «Antiguos que bajaron de las estrellas y crearon la vida en la tierra por travesura o por error».

Esto puede aludir a dos grupos de Antiguos, que llegaron a un mundo que ya había sido creado (la Tierra), y luego evidentemente algunos de ellos experimentaron con ciertas formas de vida, manteniéndose cierta ambiguedad, en cuanto a que pudo ser bien por juego o error.

Luego de la confrontación y guerra con otras razas ya mencionadas, los Antiguos o Primordiales desaparecen de la escena…

Tanto el aspecto de los Primordiales, como los Primigenios, puede parecer chocante y hasta repulsivo para muchas personas. Lo cual se debe precisamente a que en algunos casos su fisonomía no cuadra conforme a los cánones estéticos demiúrgicos de este mundo.

Si consideramos el aspecto similar a «estrella de mar» que portaban los Antiguos/Primordiales en sus cabezas , y que tal estrella lleva tradicionalmente 5 puntas (o en algunos casos más),así como sus 5 lóbulos cerebrales, y que este número se halla vínculado con la órbita estelar de Venus, y si a esto le añadimos que los Antiguos tuvieron como una de sus moradas la meseta Antártica, asoman algunos indicios entonces de quiénes eran los Antiguos que nos refiere Lovecraft.

Consideremos además el espíritu guerrero de estos Antiguos, como lo prueba las guerras que sostuvieron con otras razas, y también el arte arquitectónico en que descollaron!

En La sombra sobre Insmouth, Lovecraft brinda un detalle adicional ,que termina de clarificar la cuestión :

«En determinados lugares dejaron unas piedras pequeñas como talismanes que llevaban grabado encima un signo de esos que llaman ahora la svástica. Debían de ser símbolos de los Primordiales.»

El signo Venusino, su morada en la Antártida, y el símbolo de la esvástica, dejan pocas dudas, o ninguna, que se está refiriendo a los Siddhas hiperbóreos.

Siddhas que como ya sabemos, luego se dividen en dos grupos enfrentados entre si.

Luego, Lovecraft como ya se mencionó, trata sobre una muy amplia variedad de razas, civilizaciones desaparecidas, seres provenientes de otros mundos, entidades extradimensionales,los Profundos, etc.

No estamos implicando por supuesto que todas estas categorías sean de origen hiperbóreo, sino que hay signos de algunos de ellos que si lo son.

Así luego tenemos también la raza de los Primigenios, que incluso mantienen a veces enfrentamientos entre si.

Cabe acotar que alrededor de los Primigenios también han surgido diversos cultos, algunos de los cuales inciden en prácticas y rituales no acorde con la Gnosis hiperbórea.
En otros casos, pueden interpretarse algunos de los rituales de estos oscuros cultos, como una forma impetuosa de transgredir el sistema convencionalmente establecido de «moral mundana», penetrando en los misterios abismales a través del Necronomicón.
Y del mismo modo, aparecen sabios en distintas historias, que han procurado la sabiduría a través de procedimientos esotéricos y sistemas iniciáticos. Todo lo cual es válido, considerando la variedad en la tipología de Viryas, y que conforme a esto, existen siete más una vías de liberación.

Más allá de estas complejas cuestiones, que ameritan ser abordadas y dilucidadas en cada relato conforme a la propia Minne, se destaca la animosidad de los Primigenios respecto a este mundo.

De allí que podamos considerar esta raza también teniendo (al menos en algunos casos) una cierta orientación estratégica. Si no inicialmente cuando llegan a este mundo enfrentándose con los Antiguos, quizá posteriormente.

Considerando ciertamente el sufrimiento y dolor que prima en este mundo, resulta comprensible el propósito de los Primigenios de llevar todo a la destrucción, para el retorno al caos primordial.

Aunque no resulta del todo clara la cuestión de los Antiguos y los Primigenios ( Y nuevamente, se sugiere abordar cada caso y relato desde la propia Minne), dentro de la compleja cosmogonía lovecraftiana es válido en cierto punto considerar como referente de orientación que la humanidad (los Viryas promedio) poseen la sangre de los Antiguos, manteniéndose de hecho una alianza o pacto de sangre, y se mantiene la oposición de ciertos Dioses mayores o «Elder Gods».

Así, en el Necronomicón de Simon, en una paráfrasis del mítico texto babilonio Enuma Elish encontramos ilustrativamente lo siguiente:

» ¿ Y no fue el hombre creado de la sangre de Kingu, Comandante de las Hordas de los Antiguos?

¿No posee el hombre en su epíritu la semilla de la rebelión contra los Dioses Mayores?

La sangre del hombre es la sangre de la venganza.

Y la sangre del hombre es el espíritu de la venganza.

Y el poder del hombre es el poder de los Antiguos.

Y esta es la Alianza»

Lovecraft por otra parte ,en algunos de sus relatos , menciona explícitamente a la Atlántida y a Hiperbórea.

Dos relatos clave donde Lovecraft menciona la civilización Hiperbórea son «En las montañas de la locura», y «La sombra fuera del tiempo».

En «La sombra fuera del tiempo», menciona un Primigenio, Tsathoggua, que posee una terrible apariencia, con rostro de sapo., Y Lovecraft menciona que las leyendas de Tasthoggua eran conocidas por los Hiperbóreos.

Precisamente, Clark Ashthon Smith, que pertenecía asimismo al Círculo de Lovecraft, escribió varias historias relativas a Hiperbórea, siendo así editado su «Libro de Hiperbórea», o la más reciente nueva edición del «Ciclo de Hiperbórea» de Ashton Smith, «Hiperbórea y otros mundos perdidos», publicaca por la editorial Valdemar Gótica.

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Lovecraft y su legado reptílico

Por Christian C.

El profundo conocimiento de ocultismo de Howard Phillips Lovecraft queda plasmado en toda su excelente obra literaria, presentando también en ocasiones, velada o explícitamente, conceptos de la Sabiduría Hiperbórea.

El reconocimiento de su conocimiento ocultista es destacado, por la amplia cita y mención de dos grandes ocultistas en sus respectivas obras: Kenneth Grant y Michael Bertiaux.

En el caso de Kenneth Grant, ha sistematizado nada menos que la «Magia Tifoniana», sirviéndose en su desarrollo de numerosas referencias de los escritos de Lovecraft.

Y en el mencionado caso de Bertiaux, su orden «La Couleuvre Noire » (Culebra negra) combina el Voodoo con el Gnosticismo (apreciándose que en ambas corrientes tiene relevancia iniciática la serpiente), y descolla su exposición de la «Física del Necronomicon», física que, al igual que la Física Hiperbórea, va mucho más allá de la convencional física sinárquica.

Son numerosas las instancias en que el célebre escritor y ocultista H.P Lovecraft menciona en sus «cuentos» la presencia de seres extradimensionales de aspecto reptiloide.

El más conocido de sus cuentos, «La llamada de Cthulhu», retrata precisamente un ser de proporciones gigántescas que no es de este mundo, con aspecto que semeja a una hibridación de pulpo y dragón!

En «La maldición de Yig», aparece nada menos que «el padre de las serpientes», Yig, quien tiene completo poder sobre las serpientes, a las cuales protege, y además posee el poder para tornar humanos en serpientes…

Numerosos avatares de Yig como Dios serpiente, se han manifestado a lo largo del tiempo, sea bajo apariencia humana, o con rasgos híbridos de humano y reptil.

También se destacan en las historias de Lovecraft la transituación a través de pasajes dimensionales de un mundo a otro, o de un contexto arquetípico a otro, que sabemos son los múltiples espacios de significación en que el demiurgo proyecta la realidad ilusoria bajo la codificación de un superlenguaje.

Quién podría negar que la lampara de Alhazred era un transductor, por el que Ward Philips ( el personaje central del cuento La lámpara de Alhazred) podia transituarse en distintos espacios de significacion, de muy diversos lugares ya olvidados y epocas enterradas bajo las arenas del tiempo?

En «Los sueños en la casa de la bruja» Lovecraft comenta un extraño conocimiento oculto y procedimiento por el que la bruja Keziah Mason podía mediante el posicionamiento de determinados ángulos y símbolos, abrir portales dimensionales para viajar o trasladarse a otros espacios de significación.

Conocimiento esotérico que tiene de hecho un referente documentado , en el caso histórico de una bruja en México, que devino en la historia de «La mulata de Córdoba».

Más demos una rápida mirada a diferentes historias lovecraftianas, en que aparece la presencia reptiliana.

En «La ciudad sin nombre» se describen misteriosos y oscuros corredores , a los que se se accedia mediante entradas subterraneas excavadas en la roca, que llevaban a otros más profundos tuneles, en donde se apreciaban figuras momificadas de ancestrales seres reptilianos.

Estos tuneles y recintos a modo de templos subterraneos, eran de un nivel muy bajo,por los que el protagonista que los recorre, debe en ocasiones avanzar reptando…

Asi también las escenas de bajorelieves representados en algunos de aquellos muros, donde se cuenta la historia de esta raza reptiloide, que mantenia una animosidad completa hacia la raza humana.

Raza reptil que alguna vez habito la superficie de la llamada ciudad sin nombre ,y luego se fue desplazando e internando en las profundidades de su nueva morada subterranea.

En otra historia, «La maldicion que cayo sobre Sarnath», tambien se mencionan vestigios de una antigua ciudad, Ib, habitada previamente por una clase de humanoides reptiles color verde, y su idolo de piedra verdemar, Bokrug, Saurio acuatico….

Se menciona asimismo la venganza que tomaron estos seres reptiloides sobre Sarnath, ya que los moradores de Sarnath habían destruido su ciudad de Ib mil años antes.

En «Los muros de Erix», Lovecraft menciona expresamente hombres lagarto en Venus, del tamaño de gigantes, los cuales dominan completamente el entorno venusino.

Además están interesados en una extraña clase de cristales que parecen atesorar para su culto, en una forma que no es comprendida por los humanos que realizan expediciones a Venus, procurando los humanos estos cristales con fines de la utilizacion de su capacidad energetica.

Llama sobremanera la atención esta referencia literaria que brinda Lovecraft de hombres lagarto en Venus, ya que los Siddhas han asumido precisamente ese aspecto, habiendo entrado por la puerta de Venus.

De igual modo, la existencia de estas místicas «piedras de Venus», que los humanos buscan apoderarse aprovechando el poder energético de tales piedras.

En otro de sus cuentos, «A tráves de las puertas de llave de plata», el protagonista, Randolph Carter,logra transituarse a la época de su infancia, recreando el contexto arquetípico de esa época y lugar. Y el transductor que utiliza es la misteriosa «llave de plata», que, atención, Randolph Carter ha encontrado en la no menos extraña «caverna de las serpientes».

También Lovecraft menciona seres reptilianos que externamente semejan humanos en su cuento «El ceremonial «:

«con la respiración agitada, contemplé aquel Averno profano de leproso resplandor y aguas mucilaginosas; la muchedumbre reptiloide y encapuchada formó un semicírculo alrededor de la columna de fuego.»

Por otra parte Lovecraft nos brinda mediante otra referencia literaria una alusión a la clave genética en «El montículo». cuento en que explícitamente se remite a un ancestral experimento en que se cruzaron los reptiles con los mamíferos, estos últimos denominados «esclavos» :

«Los seres de Yoth, indudablemente, habían sido de estirpe reptiliana, y la mayoría de los fisiólogos de Tsath coincidían en que las actuales bestias fueron sumamente reptilianas antes de ser cruzadas con la clase esclava mamífera de K’n-yan».

En el mismo cuento es mencionado un culto simultáneo tanto de Yig como Cthulhu, es decir, un referente tanto de la serpiente como el pulpo:

«Adoraban a Yig, el gran padre de las serpientes, y a Tulu, el ser con cabeza de pulpo que les había guiado desde las estrellas….»

Y además tanto Yig como Cthulhu se retratan como mirándose uno al otro, lo cual acota el ancestral vínculo entre el pulpo y el reptil:

«Tales muros, tras un kilómetro de empinado ascenso, remataban en un par de inmensos nichos, uno a cada lado, en los que las imágenes monstruosas e incrustadas de nitratos de Yig y Tulu se acuclillaban observándose el uno al otro a través del pasadizo, tal como habían hecho desde la temprana juventud del mundo humano. «

Por otro lado llama la atención que la medida de tiempo que utilizaban para orientarse era la serpiente, el Dios serpiente Yig:

«Periodos de alterna vigilia y sueño, prolongados, acortados e invertidos según dictaran el humor y la conveniencia, y datados por el batir de la cola del Gran Yig, la Serpiente, correspondían muy someramente a los días y noches humanos; aunque las sensaciones de Zamacona le dijeron que debían ser actualmente algo más largos. El año, medido por la muda anual de piel de Yig, era como un año y medio del mundo externo.»

Es decir, tras la manifestación temporal fenoménica, se aprecia la presencia de la serpiente en su designio del despliegue energético.

Sin duda uno de los más extraños cuentos en lo que al tema reptiloide concierne es «El sobreviviente», donde se menciona explícitamente el legado ancestral reptil del humano, mencionando imcluso a los saurios!!

La cita en cuestión es como sigue:

«Esta era en general la sustancia de las anotaciones reunidas en la libreta. Aquellas notas hacían referencia a diversos puntos del continente, desde el Canadá hasta México, pasando por la Costa Este de Norteamérica. Desde aquel momento se hizo patente la extraña obsesión del doctor Jean-François Charriere, que le empujaba a comprobar la longevidad de ciertos seres humanos que, en sus mismos rasgos, parecían mostrar algún parentesco con antepasados saurios o batracios.»

Además Lovecraft explicita el vínculo de los saurios con Cthulhu, lo cual deja bien a las claras que tras los mitos de Cthulhu, Lovecraft buscó dejar constancia (bajo el velo literario) de la ancestral presencia reptil extradimensional y suprahumana, tema oculto que parece asomar en algunos oscuros cultos como el voodoo:

«Se encontraban ciertas referencias a los saurios en el culto vudú; existían relaciones similares con la cultura religiosa del antiguo Egipto; y aparecían oscuras y sugerentes referencias a una relación con los saurios representados por el mítico Cthulhu, en una época anterior al Crocodilus y al Gavialis; y aún antes del Tyrannosaurus y del Brontosaurus, del Megalosaurus y otros reptiles de la era mesozoica»

Dos bellas damas serpentinas se mencionan en la obra de Lovecraft. En un caso se trata de Marceline en «El lazo de Medusa», magistral cuento de Lovecraft escrito en colaboración con Zealia Bishop, donde se revela al final del cuento, una pintura con el rostro de Marceline, y su cabellera de serpientes, similar a la Gorgona.

Cabellera serpentina que incluso luego de la muerte de Marceline, continua teniendo vida…

Se sugiere también la lectura del cuento «La larga cabellera negra» del escritor Argentino, Manuel Mujica Lainez, cuento en que aparece el mismo nexo serpentino en relacion a una cabellera femenina.

El otro personaje femenino con apariencia serpentina mencionado por Lovecraft aparece en «El diario de Alonzo Typer», citando expresamente lo que dice:

«Hay una mujer que supera en encantos a todas las demás. Sus venenosos encantos son como los de una dulce flor crecida al borde del infierno. Cuando la miro de cerca se desvanece, pero sólo para volver más tarde. Su rostro tiene un aspecto verdoso, y a veces he creído descubrir una insinuación de escamosidad en su suave textura. ¿Quién es ella?»

En el mismo cuento, la genialidad de H.P. Lovecraft añade también la descripción de piedras que remiten a la serpiente:

«Esas piedras, tanto en color como en textura, no se parecen a nada que haya visto anteriormente. No son pardas ni grises, sino más bien de un amarillo sucio unido a un verde maligno y sugieren una variabilidad camaleónica. Su textura se asemeja extrañamente a la de una serpiente escamosa y es inexplicablemente nauseabunda al tacto… fría y viscosa como la piel de un sapo u otro reptil.»

Se trata de la presencia y manifestación reptil en el ámbito pétreo, que remite y orienta indudablemente al Origen.

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Los Siddhas Dracos Luciferinos

Por Christian C.

El dragón es considerado como la expresión mas plena del aspecto reptil, dado que se trata de una serpiente alada de proporciones gigantescas.

En tanto la sabiduría se halla más bien representada por la serpiente, y la transmutación tiene su correspondencia análoga en su muda de piel, el estado o condición de transmutado en si, se halla reflejado en el dragón.

Esta condición reptil ,manifestada en su mayor expresión como el dragón, no menoscaba en absoluto el aspecto reptil en que otros Siddhas se han manifestado, bien sea como hombres serpiente , u hombres lagarto.

No hay disminución o incompletitud alguna en el status de Siddha, justamente por ser tal. Sea que el Siddha se trate de un hombre serpiente, un hombre lagarto, o un saurio.

Y el mismo principio es válido en la Diosa del Origen, sea bajo el aspecto serpentino, ofídico/reptil o draconiano.

Más allá de esto, puede en ocasiones considerarse a estos Siddhas Dracos como «Siddhas entre Siddhas», desde una consideración jerárquica. Más no conforme al status ontológico de Siddha.

Puede mencionarse el ilustre ejemplo de Lucifer, quien posee manifestaciones como serpiente, lagarto, y dragón, y así es mencionado según la ocasión, en antiguos textos y tradiciones ocultas.

Si bien en la sabiduría hiperbórea se destaca en ocasiones el hombre lagarto y la mujer serpiente ,se debe a que acorde a sus designios correspondientes, en la serpiente predomina una regencia femenina, y es la mujer serpiente quien destila en sus kalas el veneno/antídoto/elixir alquímico. En tanto por otra parte, el designio lagarto se halla signado por lo masculino.

No obstante esto, no debe dar lugar a confusión, ya que los viryas, sean masculinos o femeninos, pueden asimilar y sintetizar aspectos reptilianos tanto de la serpiente como del lagarto.

No debe olvidarse tampoco que la tipología reptil surge como una irrupción de los Siddhas en el mundo demiúrgico, cuando la creación ya se hallaba desplegada y consumada.

Y justamente, debido a esa aparición reptil extraña en el mundo del Uno, la superestructura reaccionó adoptando esa tipología e imitando al reptil, en una amplia gama de matrices arquetípicas, encuadradas en su designio desde entonces manifiesto. (serpiente, cocodrilo, lagarto, etc)

Desde esa variada tipología reptil el virya debe orientarse, elevando y retrotrayendo esa condición reptil asumida, hacia su prototipo ideal en el Origen.

Para lo cual, debe irse mas allá del arquetipo reptil, «recreándolo en el Origen», o dicho de otro modo, proyectándolo a su molde original.

En griego encontramos diversos términos para serpiente, como. ophi, ophisi, herpetón o Draco, que es de donde deviene precisamente dragón. Más el término en si significa serpiente.

En sánscrito, en el marco del hinduismo y el budismo o el jainismo, el termino Naga significa serpiente, y en ocasiones puede aludir a un dragón.

Más allá de su etimología, que indica muy a las claras la identidad del dragón con la serpiente, y por otra parte la misma fisonomía serpentiforme del dragón, encontramos un acentuado ejemplo en la tradición nórdica, tan vinculada a los hiperbóreos, donde aparecen menciones de Fafnir, así como Nidhog, en ocasiones como serpiente y en otras como dragón.

En relación a Fafnir, cuando en las sagas por ej Regin se refiere a su hermano Fafnir, utiliza el término lingworm o longworm, que puede traducirse como dragón, más también como «gran gusano», respondiendo esta acepción más bien a la tipología de una gran serpiente.

En la última parte del Voluspa Edda, se comenta lo siguiente respecto a Nidhog:

«Llegará volando el oscuro dragón,
la sierpe brillante, desde Nídafjöll «

En el poema anglosajón de Beowulf, también se utilizan indistintamente los términos serpiente y dragón.

La sabiduría o capacidad de ver y comprender todo también es patente en el dragón, señalado desde su misma etimología, ya que dragón deriva de Derkei , o «ver»., Condición representada en la visión amplia y de lejano alcance de los dragones.

En las representaciones draconianas chinas se aprecia mas claramente la apariencia reptil, en tanto el arte europeo tiende a retratar los dragones de una forma que parecieran mas bien mamíferos.

La antigua China es una de las culturas antiguas más ricas en cuanto a tradiciones del dragón se refiere, y podemos apreciar el indiscutible nexo que establecían entre la sabiduría arcana y el dragón, así como la filiación del dragón que legitimizaba la pureza de sangre requerida para la condición de emperador.

Los emperadores chinos, en efecto, decían que descendían de dragones con forma humana, que a su vez eran hijos de la Diosa Un Kua y su compañero Fu Xi, que eran de naturaleza mitad draconiana y mitad humana.

El legendario Lao Tse, acorde al historiador Sse-Ma Tsien, nació luego que su madre, Liu, fuese concebida una noche oscura y tormentosa a orillas de un lago por una serpiente/dragón escamoso.

Fu-Hsi, considerado como uno de los cinco soberanos legendarios de China, ostentaba haber nacido en medio de dragones, con apariencia de serpientes.

Del mismo modo también hubo emperadores coreanos y japoneses que decían ser descendientes del dragón!

Luego, en lo que a fisonomía se refiere, el dragón es ciertamente una serpiente, mas una serpiente gigantesca alada.

Un conocido ejemplo de Siddha bajo esta apariencia,ya en latitudes de Mesoamérica, es Quetzalcoatl, llamado justamente «serpiente emplumada».

No obstante, en el caso de Quetzalcoatl, apreciamos que se halla mas próximo a la condición de serpiente, u en todo caso reptiloide, mas no cuadra a la descripción conocida del saurio/dragón.

En lengua nahualtl ,Coatl significa serpiente. En tanto existe otro termino mas preciso para dragón, que es Cipactli. ( confundido muchas veces por cocodrilo).

Las alas del dragón tampoco deben dar lugar a confusión, ya que los Siddhas traidores ocultaron su aspecto reptil asumiendo una condición alada celestial. Mas en el caso de los Siddhas leales Dracos, su apariencia reptil es claramente reconocible. En tanto que el camuflage de los Siddhas traidores les da más bien una apariencia similar a la de los ángeles, u en todo caso como una clase de hombres alados divinos.

El valor altamente iniciático de la sangre del dragón, se evidencia en el mito de Sigfrido , que luego de matar al dragón Fafnir, al probar su sangre pudo comprender «la lengua de los pájaros». Es decir, retrotrayéndonos al Origen, significa la lengua de los lagartos, o la lengua de la serpiente.

Quién no profundice en el significado gnóstico de este mito, en cuanto a la sangre del dragón y la lengua de los pájaros, y se quede meramente en el incidente mítico de «matar al dragón», permanece en un nivel de significado externo, similar al que los cristianos atribuyen al mito de San Jorge y el dragón.

El dragón oculta asimismo el secreto alquímico, reflejada esta verdad en la saga artúrica, donde los tradicionales dragones rojo y blanco que se enfrentan, representan respectivamente la sangre y veneno de la serpiente. Elixir que surge de la conjunción de ambos componentes, de igual modo que la contienda de ambos dragones.

Un secreto aludido también en la senda siniestra como la sangre del vampiro que puede conferir la inmortalidad. Y es que Dracul significa precisamente dragón.

Esta sangre de dragón es en si misma un elixir, que combina tanto la sangre como el veneno de la serpiente.

El ejemplo ya citado de Sigfrido es suficientemente ilustrativo, dado que al probar y bañarse casi totalmente en la sangre del dragón, devino prácticamente en inmortal, y también comprendió la rúnica lengua de los pájaros.

La simbología subyacente de la figura del dragón es la voluntad del espíritu por sobre la materia. El dragón posee dominio de todos los elementos. (Se traslada por tierra y agua, vuela por el aire y escupe fuego), por lo que se impone a los mismos, y al mundo.

Considerado como emblema de sabiduría por los antiguos chinos, es aceptado ancestralmente como uno de los seres mas sabios, y custodio de tesoros o secretos perdidos.

La doncella prisionera del dragón, que es rescatada por el príncipe o caballero en muchos mitos, es acorde a Robert Graves, un mito donde los valores han sido invertidos.

Siendo así, el dragón representaría aquí la fuerza serpentina oculta o poder de la doncella/princesa.. En tanto que el caballero que acude a su rescate, sería en realidad el usurpador de ese poder.

Mas este es uno de los tantos niveles de significado del mito, y no deben anclarse las conclusiones allí, sino considerarlo como uno de los tantos significados allí encriptados u ocultos.

Lo relevante a destacar, es que además de expresiones demiúrgicas del dragón, como el draconiano Enlil mencionado en El misterio de Belicena Villca, o la representación figurada del dragón de Sodoma, más allá de estos aspectos demiúrgicos, tenemos Siddhas hiperbóreos draconianos.

Y es en función de ese aspecto de los Siddhas, que el demiurgo también asume imitativamente una forma draconiana.

Lo que más se destaca en tales Siddhas dracos es, desde esta terrible forma de dragón/saurio, el furor Bersekir.

Tal la razón de que los vikingos mantuvieran la figura del dragón en sus barcos o drakkares, como mascarón de proa para aterrorizar a sus enemigos, como también en sus estandartes guerreros, de igual modo que los normandos tenían espadas con representaciones de la serpiente o el dragón.

El terrible furor bersekir que exhibían los dragones o saurios, en completa animosidad al mundo creado, ocasionó que el Demiurgo y sus agentes tomarán cartas en el asunto, provocando su desaparición visible de la faz de la Tierra.

Más hubo otras irrupciones en este mundo de los Siddhas, bajo el aspecto de hombres serpiente, y hombres lagarto, que al igual que algunos saurios draconianos, permanecen aguardando su momento, en recónditos sitios ocultos del interior del mundo.

Un comentario

Enlace Reptil y Rúnico en Tirodinguiburr

Por Christian C.

En la conformación rúnica de Tirodinguiburr puede apreciarse como se halla la runa conducente Gibur (Que en su complexión unifica tanto la esvástica levógira como la esvástica dextrógira) la cual permite al iniciado hiperbóreo acceder al aislamiento del Yo en la runa Odal (Conformada a su vez por una doble runa Sieg de la victoria.)

Es justamente de espalda al ángulo recto Beta de la runa Odal, como el Virya enfrenta la emergencia de los símbolos sagrados demiúrgicos.

Símbolos poderosos, cuya conformación arquetípica posee la capacidad de generar el fascinosum de atraer y captar la atención, capturando y fagocitando así el Yo.

Más tales símbolos deberán ser resignados con las armas rúnicas que el Virya dispone.

Y es que Gibur justamente representa el tridente de Poseidón o el Trishul de Shiva. Esta runa con las puntas hacia abajo es la espada de Wotan.

En la exploración de los registros culturales mediante la capacidad de anamnesia que disponen los iniciados hiperbóreos, se utiliza precisamente esta runa para resignar los tapasignos y sucesión de imágenes culturales en el registro a explorar.

Más cuando el Virya se ha situado de espalda al ángulo recto de la runa Odal, significa que el tránsito a través dek tridente Gibur ha sido orientado gnósticamente.

En este contexto, Gibur es análogo al tetrarque o cuádruple conformación de cada recinto en el laberinto Labrelix donde el Yo se desplaza en busca de orientación. Más a este punto, en que el Yo se posiciona de espalda al ángulo recto de la runa Odal, significa que la proyección de sentido en la incesante búsqueda se ha detenido. En vez de continuar siempre en forma extraviada, y continuamente hacia adelante a través de los tetrarques del Labrelix, el Yo «se ha dado vuelta», es decir ya «no mira» poniendo sentido al entorno cultural emergente, sino que se halla de espalda a este flujo de acontecer.
Y esa actitud de «giro» respecto al tetrarque del sendero labrelix en que se halla el Yo perdido, significa que se ha obtenido orientación gnóstica., Más tal orientación implica necesariamente una predisposición despierta o activa desde el cerebro primigenio o reptil, correspondiente a la actualización de las matrices del contexto venusino del origen.

Es decir, la condición anterior al despliegue desde el punto Tau de la interminable serie laberíntica Labrelix.

Únicamente desde la sangre fría del reptil es posible resistir la embestida emergente de los símbolos sagrados sin ser fagocitado. Así, el Yo de espalda a Odal se halla en estado de completa alerta como un centinela, manteniéndose «los ojos del reptil abiertos» y vigilantes. Condición reptil imprescindible para la eventual recuperación del Vril en una instancia posterior.

Por tal motivo, desde el cruce del abismo superando los símbolos sagrados emergentes, es como se concreta el Nigredo alquímico, sostenido rúnicamente por Gibur.

Lo cual permite al Yo orientado acceder mediante tal secreto reptil del ángulo recto, automáticamente al interior de la aislante runa Odal. Arquemona en que el Yo, iluminado carismáticamente por el luciferino sol negro, se halla resguardado por el rojo furor bersekir, y el verde aspecto reptil.

Es siendo iluminado por la radiación luciferina del sol negro , o luz negra, como el Yo posicionado en Odal logra concretar la fase de Albedo. Para eventualmente mediante el puente noológico de la escalera caracol (Sistema real artificial hiperbóreo, creado por el Virya o un Pontífice, consistente en objetos culturales emergentes y referentes, con una orientación gnóstica hiperbórea) y la escalera infinita, acceder al Selbst, o el Yo infinito, nucleado en la esfera de voluntad egoíca Ehre.

Tal fase concreta el Rubedo alquímico, del que ya se tiene una orientación desde el yo aislado en Odal, y es una etapa sostenida rúnicamente por la runa Tyr.

Desde la runa arquemónica aislante Odal, el Yo se halla protegido y aislado del sujeto anímico. Más todavía se trata de una expresión finita del Yo, como reflejo del Yo infinito, a consecuencia del encadenamiento espiritual en su segundo acto, cuando una de las miradas del Yo infinito en busca de orientación, se reflejó en el símbolo del origen plasmado en la sangre del Pasú por los Siddhas traidores.

Más accediento al Selbst, el Yo se halla nuevamente en el ámbito infinito, ya no delimitado ni espacial ni temporalmente.

Resulta así desde el Selbst, el Yo posicionado en Hagal, runa conformada por una doble Tyr, y que para algunos es considerada como la auténtica concreción de Rubedo.

De cualquier modo, es únicamente desde la orientación de Gibur, como puede accederse al tránsito de las tres runas noológicas : Odal, Tyr y Hagal.

Sintetizando, en Tirodinguiburr tenemos un abismo insondable por el que el Yo debe atravesar, (El Yo de espalda al ángulo recto Beta de la runa Odal) percibido por el alma como oscuridad amenazante y devoradora, para posteriormente ya aislado (Dentro de la arquemona Odal) recibir la radiación luciferina del sol negro.

De modo que hay en una primera fase una etapa arquetípica que debe superarse, signada por el negro, y luego una condición noológica de radiación luciferina, también signada por el negro, más en otro nivel de significado muy distinto.

Análogamente, el Yo orientado se posiciona en su condición o aspecto reptil, signado por el verde, que es de igual modo como se halla en una instancia superior signado el Vril, para la comprensión orientadora hiperbórea.

Y es en el interior de la arquemona Odal, desde el furor hiperbóreo guerrero , como puede resistirse y afrontar el ataque y combate, ya no con los símbolos sagrados emergentes, sino con el demiurgo mismo y sus arcontes.

Hostilidad esencial signada por el rojo, como así también en una instancia superior, la etapa de rubedo y el cuerpo de vajra, signados asimismo por el luciferino rojo, que tiene su contrapartida demiúrgica imitativa en el rojo de la pasión esencial.

Encontramos por tal motivo en diversos mitos, la saga artúrica ,etc, dragones negros, blancos, rojos, verdes…. que pueden bajo distintos encuadres ajustarse a estos diversos niveles de significado.

Un comentario

Aproximación iniciática al mito de la Gorgona

Por Christian C.

La exposición del mito de la Gorgona, desde la perspectiva hiperbórea ,tal como la expone el Pontífice Nimrod de Rosario en El misterio de Belicena Villca, arroja importantes aspectos y claves iniciáticas gnósticas que es conveniente mencionar y destacar.

Citando en cuestión algunos extractos seleccionados, tenemos el inicio de tal exposición como sigue :

«El tema es simple y, en cuanto lo exponga, Ud. comprobará que no puede
proceder más que de la Sabiduría Hiperbórea de los Atlantes blancos. Una
representación Hiperbórea del Origen, como ya lo mencioné más atrás, fue
Thule, el centro isotrópico de donde procedía el Espíritu. De manera semejante,
para los primeros descendientes de los Atlantes blancos, el Origen fue Ponto, al
que luego se personificó como un Dios del Mar y se identificó con la Ola,
seguramente porque de este “Origen” provenían sus Antepasados. Este Ponto se
desposa con Gea, la Tierra, quien da nacimiento entre otros a Forcis y Ceto,
símbolos prototípicos de los seres híbridos, mitad animales mitad Dioses: en un
trasfondo esotérico esta imagen alude al Espírtu aportado por Ponto, el Origen, al
animal hombre hijo de la Tierra. Los hermanos Forcis y Ceto se aparean a su vez
y, junto a una serie de Arquetipos híbridos, dan vida a tres mujeres que ya nacen
“viejas”: las Grayas o Greas, es decir, las Grises. Naturalmente, las Grayas no
son otras que las Vrayas, las Guerreras Sabias encargadas de custodiar el Arado
de Piedra y la Piedra de Venus: son “viejas” porque deben ser Sabias y los que
ignoran el significado de los instrumentos líticos afirmarán luego que “entre las
tres sólo tenían un Ojo y un Diente”.

Se alude por un lado al virya como híbrido de un componente hiperbóreo, y uno demiúrgico. El aporte demiúrgico tiene su raíz en el Pasú, ampliado y desarrollado luego de la clave genética, que devino en un microcosmos biológico de estructura psíquico-emocional compleja.

Y el componente hiperbóreo, el que permitió la aceleración en la conformación del actual Virya, es el aporte del gen reptil inoculado por los Siddhas traidores, precisamente mediante la clave genética.

De modo que cuando se dice «mitad animales mitad Dioses», aquí por «Dioses» entendemos los Dioses del Origen, en su aspecto reptil.

En medio de estos Viryas, se han manifestado en forma recurrente las Vrayas, o custodias del legado de la sabiduría hiperbórea (Piedras de Venus y el arado de piedra), representadas en el mito como las Grayas.

Estas Grayas nos dice el mito ya degradado, se creía que poseían entre las tres hermans «un ojo y un diente», alusión sin dudas a los instrumentos líticos que custodiaban., Más al mismo tiempo, estos términos «ojo» y «diente» transmiten también la imagen de la figura que el mito de la Gorgona ya degradado culturalmente ha pretendido anatemizar., Es decir, aquí ojo y diente son los de la serpiente, destacándose en la serpiente su ojo siempre abierto, y sus amenazantes colmillos.

En clave oculta, lo que el mito ha pretendido ocultar bajo el tapasigno de su forma actual conocida, es que a través de la piedra de Venus, era posible comprender noológicamente a la serpiente. Y que las custodias de tal legado gnóstico eran las Vrayas, aquí en el mito ya rebajadas y caricaturizadas como teniendo entre las tres un mismo ojo y diente.

Luego, se menciona también el Origen, representado míticamente como Ponto, y personificado posteriormente como el mar, lo cual tiene desde el mito una correspondencia analógica gnóstica con el aspecto lagarto de cada Virya, que se halla en las «profundidades acuosas» del inconsciente, y la representación hiperbórea mítica del pulpo.

El texto continua diciendo en relación al héroe Perseo:

«Perseo es la idealización del Espíritu cautivo que intenta la hazaña de
liberarse de la prisión material; su objetivo es descubrir el Secreto de la Muerte,
conseguir la Más Alta Sabiduría, y hallar a la Pareja Original. Navután y Frya lo
nspiran para que consulte a las Vrayas y ellas, con la Piedra de Venus, le indican
el camino a seguir: debe dirigirse a un Bosque Sagrado de Fresnos y reclamar la
ayuda de los Dioses para enfrentar con éxito a la Muerte.»

Debe destacarse aquí, que en la búsqueda iniciática de Perseo por hallar el secreto de la muerte, la sabiduría y hallar a la pareja original, aparece siempre la serpiente como referente o indicativa de los aspectos mencionados.

Es decir, la serpiente desde antaño fue representativa de la sabiduría, condición que en el designio de la serpiente en este mundo encuentra su reflejo en el ojo de la serpiente que permanece siempre abierto, «viéndolo» todo, y por tanto, conociéndo todo.

Asimismo la serpiente siempre fue reconocida como símbolo de la medicina y la inmortalidad, apreciaciones que tienen también su asidero en el veneno de la serpiente que puede utilizarse como antídoto, e incluso elaborarse un alquímico elixir, y en la muda de piel, donde la serpiente fue apreciada como renovándose o «renaciendo», «emergiendo nuevamente tras la muerte».

De igual modo , respecto a la «la pareja original», considerando que el Gran antepasado o Siddha hiperbóreo es en el Origen un «hombre lagarto», su compañera es la «mujer serpiente».

Más hay una cuestión que resulta a todas luces llamativa, y siempre presente en el mito de la Gorgona. Y es el hecho de su mirada petrificadora, o que quien la mirase se «tornaba en piedra».

El texto en cuestión nos dice lo siguiente:

«Al aproximarse a Frya, Navután aconseja al héroe no detenerse a mirar el Rostro de
Muerte, lo que causaría su inmediata destrucción, y concentrarse en el Espejo
que la Diosa de la Sabiduría significa tras la Muerte: ¡sólo así podrá vencer a la
Muerte!, Perseo cumple las indicaciones con exactitud y, contemplándose en el
Espejo de Frya, consigue comprender a la Muerte y se transforma en Hombre
de Piedra Inmortal. A su regreso de la Muerte, Perseo emplea la Lengua de los
Pájaros para comprender a la Serpiente con el Signo del Origen: entonces
adquiere la Más Alta Sabiduría y encuentra a su Pareja Original.

Hasta aquí, lo más importante del tema original transmitido a los pueblos
nativos por los Atlantes blancos. Es evidente que gran parte del mismo,
milagrosamente recordado gracias a la misión familiar, fue incorporado por los
Señores de Tharsis en la Reforma del Fuego Frío. Los lidios, posteriormente,
contribuirían a su degradación mediante la “perfección de la forma ritual”, que
consistía en el demencial intento de exhibir exteriormente, plasmados en la
materia, unos signos que sólo pueden ser metafísicos.»

Aquí tenemos un aspecto clave, y es que Perseo es aconsejado por Navután de no mirar directamente a la Diosa, ya que de hacerlo le acarrearía la muerte inmediata. Esto es análogo por otra parte a la condición de los Siddhas, de quienes se dice que su terrible presencia frente a un Virya, puede o bien transmutarlo si el Virya se halla despierto y orientado (por vinculación carismática), o de lo contrario su microcosmos ser destruido, debido a la hostilidad esencial que tales Siddhas siempre despliegan frente a todo lo creado.

Análogamente la Diosa de la sabiduría es abordada por Perseo a través del reflejo de un espejo, es decir un cristal. Tal es la «piedra» rúnicamente trabajada, que posibilita el acceso a la sabiduría hiperbórea desde la comprensión noológica del Origen.

En la prueba iniciática de Pyrena de la casa de Tharsis, la predisposición gnóstica de quienes buscaban ir al encuentro de la muerte y su misterio, confería a los que más arrojo de valor y pureza de sangre ostentaran en su prueba, la condición cual «cristal» apropiado para recepcionar la mortífera y transmutadora mirada de la Diosa.

Y de modo análogo a la avasallante y mortal mirada de la Diosa, o de los Siddhas de Agartha, también encontramos en la serpiente tal replica de esta doble condición mortífero-transmutadora, ya que la mirada de la serpiente bien puede hipnotizar y llevar su presa a la muerte, como también su ojo que nunca se cierra ser apreciado y reconocido en su condición de siempre verlo todo.

La escultura de Pyrena de la casa de Tharsis fue tallada luego de la alianza con el pueblo de los lidios, quienes promovieron tal proyecto. Y cuando se dice en el texto citado «unos signos que sólo pueden ser metafísicos», se comprende claramente que la representación de estos signos o runas son precisamente las serpientes de la cabellera de la Diosa, ya que como representación última de todo despliegue energético y de la sabiduría e inmortalidad es la serpiente el enlace iniciático con el mundo increado.

Continuando con la exposición del mito de la Gorgona, tenemos que:
«En tiempos de la caída cultural de los pelasgos, mucho antes de que los
Golen iniciasen su siniestro desplazamiento hacia Europa, el tema original se
consteló como Mito, los Nombres fueron cambiando, y los significados se
distorsionaron e invirtieron. En el Mito argivo, Perseo, por encargo del tirano de
Sérifos a quien prometió imprudentemente traer “la Cabeza de Medusa”, se dirige
a la Tartéside pues el Monstruo habita un bosque de la península ibérica:
semejante localización no es gratuita puesto que Vides, el Señor de K’Taagar, fue
denominado por los Sacerdotes Ides, Aides o Hades, el Señor de Tar, es decir,
del Tártaro o Infierno, con lo que Thar-sis, Tar-téside, Tar-tessos, etc., pasaron a
designar lugares infernales. A esa ubicación contribuyeron también, en gran
medida, los Golen, cuando lograron observar la escultura de la Diosa Pyrena y la
identificaron en todo el mundo antiguo como “la Gorgona Medusa”. Al Perseo
argivo lo ayudan Hermes y Atenea, en quienes aún es posible reconocer a
Navután y Frya. Navután, en efecto, fue llamado Hermes, Mercurio, Wothan, etc.;
como Hermes, según los griegos, era hijo de una mujer “atlante”, hija de Atlante,
y de un Dios (Zeus), lo que no está lejos de la genealogía del Gran Jefe de los
Atlantes blancos; fue inventor de un alfabeto, de la lira y la siringa, las que canjeó
a Febo, el Sol, por el caduceo con el que éste pastoreaba a sus rebaños: si se
considera que el caduceo es una vara con dos serpientes enrolladas, que El Sol
representa al Dios Creador, y el rebaño a los animales hombres, es fácil distinguir
en la figura de Hermes a la del que ha comprendido, mediante un lenguaje, al
Símbolo de la Serpiente con que el Dios Creador pastorea a sus siervos. Y Frya,
por su parte, fue conocida como Atenea, Minerva, Afrodita, Freya, etc.; de Ella,
los griegos decían que “había nacido ya armada”: era, pues, Diosa de la Guerra,
de la Sabiduría, y del Amor.»

No puede omitirse tan importante comentario de la Gorgona morando en el inframundo o Tártaro, que tiene vínculos etimológicos y significativos con la casa de Tharsis y Tartessos.

La presencia de alguna figura ofídica en el inframundo es bien conocida en la cosmogonía mítica de muchas tradiciones,lo cual remite justamente a la idea que es preciso descender a las profundidades desconocidas, temidas, y oscuras, para hallar la sabiduría y secreto de la serpiente.

El ejemplo aportado de Hermes-Mercurio (quien es análogo a Wotan) resulta de lo más significativo, ya que aquí se menciona el caduceo serpentino que Hermes porta, representativo de su comprensión del modo como el demiurgo mantiene subyugados a los espíritus cautivos.

Y tal significado se basa en que el caduceo son justamente dos serpientes enroscadas alrededor una vara. Tales serpientes son aquí figurativas del Siddha-reptil y su Diosa serpiente, ya que los espíritus hiperbóreos son inseparables, tal como dos serpientes entrelazadas.

El engaño perpetrado por los Siddhas traidores fue justamente el despliegue de una imagen de Ella, la Diosa serpiente, imagen que no era Ella, sino solo su reflejo….

Y esa imagen de Ella, es la que el Yo extraviado busca incansablemente, arrastrando sin saberlo en su búsqueda y movimiento el desarrollo entelequial monádico.

Más , el sobreponerse a tal «imagen», es decir, hacer consciente el símbolo del origen desde la sangre, enfocándose en tal sentido hacia el Origen, donde se halla realmente Ella, la Dama Serpiente, significa haber sobrepasado el designio serpiente en lo arquetípico, comprendiendo la serpiente desde lo noológico, o desde el Origen.

Origen en que nuevamente se halla la presencia indisoluble de Ella y El, figurados como dos serpientes entrelazadas,comprensión noológica que se escenifica en el caduceo serpentino portado por Hermes, o también Apolo-Lucifer.

Símbolo serpentino desde la sabiduría hiperbórea, que fue degradado y «tapasignado» bajo la imagen gnóstico-demiúrgica del ascenso de la kundalini shakti y la fusión con el Uno.

Tal comprensión del caduceo explica aquella misteriosa referencia de El misterio de Belicena Villca:

“Has perdido el Origen y eres prisionero de la serpiente: ¡con el Signo del Origen, comprende a la serpiente, y serás nuevamente libre en el Origen! «

Ser «prisionero de la serpiente» se entiende a esta altura, es ser prisionero de aquella ilusoria imagen de Ella, de aquella «imagen de la Diosa Serpiente», que el Yo confundido aquí busca.

En tanto enfocarse con el signo del origen en forma consciente hacia la serpiente, permite comprenderla desde el Origen, donde el Yo será nuevamente libre, en presencia de la verdadera serpiente, la Diosa serpiente, o mismo el Dios serpiente Lucifer.

Es desde esta última consideración como puede apreciarse varias menciones de El misterio de Belicena Villca tales como «serpiente de luz increada», «serpiente liberadora», etc.

También cabe destacar que comprender a la serpiente (tanto su designio-copia en este mundo, como la comprensión desde el origen) es posibiltado por la orientadora runa conducente Gibur, que permite arribar de espaldas al angulo recto de la aisladora runa Odal.

Aquí la orientación de la runa Gibur en forma de tridente o Trishul, implica el haberse posicionado o situado en el propio aspecto reptil (Angulo recto del cerebro reptil en el occipital o «de espaldas»).

En Fundamentos de la Sabiduría Hiperbórea , Tomo V ,se comenta lo siguiente en relación a la runa Gibur y el «origen del encadenamiento espiritual» o Punto Tau:

«El punto TAU es el 1º punto de Tetrarque del camino Labrelix, el momento del encadenamiento espiritual al Simbolo del Origen; internamente este punto es alcanzado por el Yo del Iniciado luego de ser armado Caballero Tirodal: porque la Runa Gibur señala justamente ese primer tetrarque. Empero la facultad de anamnesia ha de allanar, posteriormente, la distancia espacial y temporal que separa EXTERIORMENTE al Iniciado del Punto TAU: es posible alcanzar fisicamente el Punto TAU historico, desplazarse hacia el lugar y el instante pasado en que ocurrio la caida del propio Espiritu Hiperboreo. Hacia alli viajara el Caballero Tirodal gracias a la Escalera Caracol que construirá con su facultad de anamnesia, gracias a una ESCALA cuya estructura estará conformada funcionalmente por matrices arquetipicas del designio caracol»

» Con respecto a la escalera Caracol cabe agregar que su empleo es inevitable si se pretende regresar FISICAMENTE al Origen; en cambio el regreso NOOLOGICO al PuntoTAU, protagonizado por el Yo del Caballero Tirodal armado con le Runa Gibur, es un tránsito instantáneo, un tránsito que no requiere atravesar distancia alguna porque toda distancia ha sido suprimida por la pureza de sangre.»

Tenemos aquí, sintetizando, un Yo extraviado por una ilusoria imagen de Ella, imagen que es desplegada en lo que se conoce como «designio de la serpiente», que es expresión imitativa de la Diosa serpiente del Origen. Bajo esa imagen, o siguiendo ese «espejismo» el Virya perdido es «prisionero de la serpiente».

Mediante la runa Gibur, que es expresión y proyección aquí del «signo del origen», se puede comprender a la serpiente (accediendo al propio aspecto reptil oculto), y acceder al Punto Tau, o el origen del encadenamiento espiritual.

Tras ese «origen» se halla el origen del contexto de la puerta de Venus, por donde los Siddhas entraron a este mundo asumiendo el aspecto reptil. Y más allá, en un ámbito rúnico incognoscible se halla el origen del mundo increado.

Una acotación oportuna es que el mencionado aspecto reptil es ajeno a la obra del demiurgo, ya que fue adoptado por los Siddhas cuando ya se hallaba iniciada la creación del demiurgo.

Más ocurre que al hacerse manifiesto o emerger este aspecto reptil en la esfera de sentido del mundo, rápidamente como reacción de la superestructura, la creación demiúrgica intentó asimilar e integrar esta tipología de estructura de vida orgánica, deviniendo así como no podía ser de otro modo, en una copia imitativa arquetípica.
No obstante esto, cuando posteriormente los Siddhas se dividieron en dos bandos, y los Siddhas traidores aplicaron la llave kalachacra, formas de vida reptil comprometedoras, como los saurios, fueron hechas desaparecer del mundo.

De modo que puede considerarse que en el Origen hubo un aspecto reptil hiperbóreo, expresado por los Siddhas directamente desde el Vril.

Y aunque para interactuar con el entorno axiológico circundante se precisara algún tipo de despliegue arquetípico, era controlado no por el Demiurgo, sino por la voluntad de los Siddhas.

En una segunda instancia , surge una copia arquetípica reptil, que continuó su devenir en el tiempo trascendente , ya integrada en la superestructura con un soporte arquetípico.

Desde esa copia reptil, surgieron también arcontes demiúrgicos que asumieron algunos de estos rasgos ofídicos, arcontes en su jerarquía por debajo de los Siddhas. ( Tanto respecto a los Siddhas leales como «hombres lagarto» como de los Siddhas traidores, que disimularon su condición reptílica asumiendo un camuflaje con alas).

No obstante esto, puede considerarse que el aspecto reptil (Y concretamente la serpiente y el lagarto) aunque manifestado desde un despliegue arquetípico, es lo más próximo al Origen.

Por último en la descripción de como se tergiversaron los significados del mito de Perseo y la Gorgona, se refiere lo siguiente:

«A partir de su viaje inverso a la Tartéside, el Perseo argivo comienza a
comportarse como un claro exponente del Pacto Cultural: no consulta a las
Vrayas sino que les roba el ojo común; éstas lo envían a Alsos, el hogar de las
Alceides, es decir, a un bosque sagrado, donde encuentra a las Ninfas Melíades,
las que no son otra cosa que personificaciones de los Fresnos; las Ninfas le
suministran un saco de piel de grulla, donde colocará la Cabeza de Medusa, y
unas sandalias que permiten volar; Hades le presta el casco de la invisibilidad; y
Hermes le entrega una hoz con forma de media luna para cortar la cabeza del
monstruo. Pero lo que más delata a esta falsificación engendrada por los
Sacerdotes del Pacto Cultural es la prevención del Perseo argivo que teme
convertirse en Hombre de Piedra. Porque en el Mito egeo no es una Sabiduría
posterior sino la propia mirada de Medusa la que convierte en piedra; la
Sabiduría, por el contrario, no está atrás de la Muerte sino afuera, junto a Perseo,
definitivamente independizada e inalcanzable para él. Ella no permite que él se
refleje en su Verdad Desnuda: se limita a colocar un espejo objetivo donde el
“héroe” contemplará la Muerte sin que ésta lo atrape. Es toda la ayuda que le
brinda Atenea: viéndola desde el espejo, Perseo clavará la hoz en el cuello de
Medusa y dará muerte a la Muerte, sin que esta “hazaña” le permita alcanzar la
inmortalidad. El espejo de Atenea es su escudo protector; la Cabeza de Medusa,
obtenida en la inútil hazaña del perseo argivo, es colocada por la Diosa en el
centro del escudo, dando a entender claramente que en esta Era, luego del
triunfo del Pacto Cultural, la Sabiduría está escudada en la Muerte, sin que exista
posibilidad alguna a los mortales de llegar a ella. Desde luego, esto es sólo una
amenaza de los Sacerdotes del Pacto Cultural para desalentar la búsqueda de la
liberación del Espíritu. En fin, como el Perseo argivo ni alcanzó la inmortalidad ni
consiguió la Sabiduría, no podrá comprender a la Serpiente y por eso se ve
obligado a matarla también, cosa que hará a la vuelta de su “hazaña”, cuando
lucha contra un dragón y libera a Andrómeda, con la que se une y procrea
numerosa prole.»

Tenemos así que los Dioses liberadores fueron reemplazados por «el bosque de fresnos», lo cual delata la falsificación druida de la historia, teniendo en cuenta el valor de culto que los golen druidas asignaban a los árboles.

También el símbolo de los Pontífices hiperbóreos, es decir la media luna, que significa el puente noológico, ha sido reemplazado por la hoz en forma de media luna. En un caso se trata del transito hacia el Selbst. Transito que implica haber comprendido a la serpiente, y haberse posicionado en el propio aspecto reptil. En tanto que en la versión degradada del mito, la hoz es utilizada para matar a la serpiente, reflejo mítico como no podía ser de otra manera, del ancestral odio sinárquico a la Serpiente.

Luego, la mirada en el reflejo del espejo no deja de ser altamente significativa, ya que originalmente fue por una «mirada refleja» como el espíritu quedó cautivo, y así también la aproximación a la Diosa recorre un transito iniciático similar , mirándola no directamente, sino desde un reflejo, lo cual significa un recorrido inverso de orientación al Origen.

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La Dama Serpiente

Por Christian C.

Lilith como la Diosa serpiente es representada en algunas pinturas con una serpiente enroscada alrededor de su cuerpo.

Y en otras ella misma presenta rasgos ofídicos, por ejemplo con cuerpo de serpiente de la cintura para abajo. Lo cual significa el poder sexual de la mujer serpiente, aquella que encarna a la Diosa serpiente.

La Diosa serpiente ha sido encarnada en su poder por sacerdotisas consagradas a la Diosa en la antiguedad, por las Suvasinis en su rol de «prostitutas sagradas» del circulo Kaula., o conocidas también a veces como Devadasis.

También por danzarinas que llevan a cabo una danza acompañadas de una serpiente, o ellas mismas realizando una danza serpentina en movimientos oscilantes, ondulatorios, tal como la serpiente.

Y también ha sido encarnada por las mujeres Kali, a veces conscientes y otras no, de su poder.

Así como Lucifer es el Dios serpiente, su compañera Lilith, es la Diosa serpiente.

Y del mismo modo, tenemos en el Origen a los hombres lagarto, y las mujeres serpiente, quienes reciben genéricamente también el nombre de Lilith.

De allí que el símbolo del origen es el símbolo de Ella, la dama serpiente, que es la Dama del origen, expresión rúnica pura del Vril.

Debe acotarse que siendo la kundalini una expresión del logos demiúrgico, y representado en forma de serpiente, existe por otro lado un aspecto serpentino hiperbóreo, donde lo serpentino se expresa desde el Origen. Tal es el aspecto del Vril, expresado como la Diosa serpiente.

Tenemos así la Diosa serpiente o mujer serpiente en el Origen, y luego en este mundo determinadas mujeres que de algún modo encarnan y reflejan el poder y aspectos de la Diosa serpiente. Tales mujeres son por tal razón también denominadas como mujeres serpiente.

La mordida iniciática de la serpiente, es la mordedura de Lilith., De allí el enlace con la mordedura de la mujer vampiro, siendo Lilith la reina de los vampiros y súcubos.

La mujer serpiente posee el veneno, así como el antídoto y elixir, contenido en su kalas menstrual.

Kalas que es producido en consonancia con la luna, cuyo ciclo de 28 días encuentra su expresión ofídica en los 28 anillos de la serpiente.

Del mismo modo como la luna presenta una fase visible y una no visible, similarmente la serpiente aparece y se oculta a intervalos regulares.

La reaparición estelar visible de la luna, es análoga aquí a la serpiente que se renueva mudando de piel, del mismo modo que la renovación biológica de la mujer en cada ciclo lunar.

En el film «La novena puerta» de Roman Polanski, se aprecia la escena en que el protagonista (Johnny Dep) efectúa el maithuna con la mujer luciferina, que es a todas luces en este contexto la mujer serpiente.

Los elementos que se destacan en tal sentido son la llamada «postura de Lilith» o Viparita Rati, en que el maithuna se lleva a cabo estando la mujer por sobre el hombre, y también en otra instancia cuando la mujer serpiente unge el kalas rojo en el rostro del protagonista, a la vez que se nota un fulgor verdoso momentáneo en los ojos de ella…

Remitiéndonos a la Diosa serpiente, encontramos al explorar los registros culturales expresados en las mitologías y cosmogonías de distintas tradiciones, que todas las Diosas iniciáticas se hallan representadas o bien acompañadas por una serpiente, o portando un símbolo serpentino, u en otras ocasiones la misma Diosa retratada como serpiente, o teniendo caracteres serpentinos.

En Fundamentos de la Sabiduría Hiperbórea, Tomo 9, «Posibilidades de la vía tántrica», Nimrod de Rosario nos dice:

«Aquí, lo mismo que con Shiva, nos remitiremos a la Sabiduría Hiperbórea la cual enseña que Kaly, así como la Isis egipcia, la Ishtar babilónica, la Venus romana, la Afrodita griega, la Shing Moo china, la Sophia gnóstica, etc., son todas imágenes brotadas del recuerdo de sangre de los linajes hiperbóreos. Recuerdo de sangre decimos pero ¿de quién?: de la «esposa» de Lúcifer, a quien bien podemos llamar Lillith de ahora en adelante».

Debe destacarse en tal sentido que en las Diosas aquí mencionadas se aprecia el vínculo ofídico señalado. Así, Isthar es descrita en antiguos textos como teniendo escamas de serpiente, hay advocaciones serpentinas de Isis, (que por otra parte regía en oráculos serpentinos), alguna representación también de Venus y la serpiente, y la Sophia gnóstica, cuyo mismo nombre (derivada de Is Ophi o «luz de la serpiente») remite etimológicamente a la serpiente.

Análogamente, se halla el aspecto de la Diosa en su rol de madre del niño reptil , o «niño de piedra», cuyo registro halla una representación escultórica de muchos miles de años atrás, como bien refiere Leonor Calvera en su libro «Historia de la gran serpiente» :

«En el museo de Bagdad se encuentra una estatuilla que data del V al lV milenio a.C. Se trata de una de las cinco mil figuras encontradas en el Kurdistán iraquí y pertenece al período Obeid.

Es una terracota de 15 cm de alto que muestra a una mujer desnuda, de hombros alados y pelo recogido. Trazos en forma de tríangulo marcan la pelvis y, junto a su pecho, sostiene a una criatura. Todo ello parece sugerir una de las tantas representaciones de la Gran Diosa en dos de sus tres aspectos: el de doncella y madre. El conjunto no sería especialmente llamativo si no fuera porque la mujer y el niño que abraza ostentan un rostro semejante de reptil, de reptil sonriente.

La efigie de Ur consolida una concepción mucho más antigua : La que dio forma a las Venus Esteatopigias. Todas ellas -la de Lespugne, la de Savignano, la de Dolni-Vestonice y, particularmente, la de Windelford- con sus senos abultados, y su abdomen prominente, su forma alargada carente de brazos y su rostro donde los rasgos humanos dan paso a los serpentinos,anticipan, siete mil años antes, la idea de una mezcla turbadora e incógnita entre mujer y ofidio.»

Sea al inicio del tiempo, cuando en cada kalpa se despliega la terrible manifestación universal demiúrgica, sea en el inframundo proscrito por las tradiciones abrahámicas ,o desde su influencia estelar representada en el cielo nocturno como la constelación de la serpiente, lo cierto es que la Diosa serpiente siempre ha estado allí presente.

Y cuando todo desaparezca, también allí la Diosa serpiente permanece, hallándose en la negrura infinita primordial, más allá de todo lo manifestado.

Dicha negrura infinita se expresa en la misma Diosa (siendo su esencia la misma oscuridad serpentina), que cual agujero negro abismal, devora finalmente la falsa luz de este mundo en todo lo aquí manifestado.

Desde la etimología resulta más que interesante el nombre aportado por Herodoto de Sauromacia, ya que deriva etimológicamente de Sauro o reptil y Mater, madre. Significando así la madre reptil, o la madre serpiente. Cuestión que se torna significativa considerando que las amazonas de Sauromacia rendían culto a la Gorgona.

En el registro hiperbóreo del misterio de la Gorgona, expuesto en El misterio de Belicena Villca, encontramos que en la historia original del mito (anterior a su deformación cultural sinarquizada) Perseo es aconsejado de aproximarse a la Diosa, la Gorgona (quien es la misma Frya o esposa de Navután) sin mirarle directamente, ya que esto le acarrearía la muerte inmediata.

Por el contrario se le aconseja mirar a través del reflejo de un espejo a la Diosa, para así contemplando dicho reflejo, comprender la sabiduría que la Diosa significa tras la muerte. Así es como Perseo se concentra en el espejo, donde aprecia la verdad desnuda de si mismo, comprendiendo a la muerte, y tornándose en hombre de piedra.

Similarmente, un Virya puede en ocasiones hallar en este mundo algún tipo de mujer que exprese la esencia ofídica de la Gorgona. Se trata de una clase de mujer que en su dimensionalidad oscura, ostenta los signos de la muerte, y su veneno se trasluce claramente.

Veneno que puede resultar en brebaje alquímico para el virya despierto, o ser mortífero para un incauto….

De cualquier modo, el punto a resaltar aquí es que en el caso de la Diosa Gorgona, el héroe Perseo no debía mirarla directamente, sino a través de un espejo, o reflejo.

Más en el caso de la mujer ofídica que aquí se esta mencionando, ella misma es en si un reflejo de la Diosa, ya que en ella se reflejan los atributos y esencia ofídica de la Diosa serpiente.

Un ejemplo sería el de la mujer Kali, en la prueba de los cinco desafíos de la vía humeda del sendero tántrico Kaula, donde efectivamente debe mirarse a los ojos de la mujer Kali, ya que como bien se refiere : “LAS PUERTAS DE LA ETERNIDAD SON LOS OJOS DE LA MUJER KALY”.

Por lo que, si un virya orientado, en búsqueda de la Gnosis, afronta el misterio que encarna tal mujer serpiente, se establece entonces una conexión o puente con la Diosa serpiente del Origen.

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La Alquimia y el elixir serpentino

Por Christian C.

Debe comprenderse que la serpiente se halla en la misma esencia de la alquimia, y el propósito de los alquimistas era el elixir de la serpiente.

Esta es la razón de tantos textos y grabados alquímicos, donde aparece la serpiente.

Y desde la sabiduría hiperbórea esto se torna más que relevante, ya que la alquimia es justamente una de las 7 más 1 vías de liberación.

Además resulta notorio que el fundador atribuído al saber hermético de la alquimia sea precisamente Hermes, a quien en la Sabiduría Hiperbórea se menciona como análogo a Wotan. Y el punto en este contexto a destacar es que precisamente Hermes es portador del serpentino caduceo!

Más, la alquimia ha sido muy manipulada y distorsionada en sus significados ocultos a través del tiempo, contribuyendo además el carácter hermético que la caracteriza a ser conocida únicamente por ciertos círculos de iniciados.

Su anatemización por parte de la Iglesia, ha ido a la par precisamente de la ancestral proscripción de la serpiente y su saber iniciático.

Tenemos en la alquimia una praxis externa, focalizada en la manipulación química y mágica de los metales, tendiente a operaciones de transformación y manipulación, y una alquimia interna, donde los metales son aquí símbolos referentes de los estados de la psique a sublimar y transformar.

Bajo esta última perspectiva, el alquimista opera en su misma estructura psico-física como atanor alquímico. Y la consecución última del Magnum Opus o «piedra filosofal» es aquí el «Hombre de piedra», o el Yo aislado del contexto fenomenológico psico-anímico.
En este proceso de mutación alquímica, el iniciado purifica su sangre, principalmente de la matriz homínida (etapa de Nigredo), y sus aditamentos sutiles, permeando ahora su estructura psico-física esencialmente la sangre fría reptil hiperbórea (etapa de Albedo).

Cabe mencionar que aunque se atribuye al psicoanalista suizo Carl Jung todo un aporte respecto a la dilucidación de la alquimia, faltaría complementarlo con el aporte de la Sabiduría Hiperbórea.

Ya que el enfoque Junguiano se focaliza en el Self o el Si Mismo del sujeto anímico, en tanto que para la efectiva transmutación alquímica y liberación del Yo, es preciso arribar al Selbst ,o el Si mismo del Yo infinito, nucleado en la esfera de voluntad egóica o Ehre.

Concepto este último que desarrolla Nimrod de Rosario en su obra Fundamentos de la Sabiduría Hiperbórea.

El simbolismo ofídico en la alquimia es sumamente variado, y uno puede remitirse a los significados crípticos preservados del arte alquímico, que han llegado a nuestros días, así como antiguos textos de alquimistas, como por ejemplo Las doce llaves de Ripley, las obras de Basil Valentinus, el Musaeum Hermeticum, etc.

En este símbolismo alquímico pictórico se aprecian por ejemplo el caduceo, el uroboros, la serpiente alada, sin alas, crucificada (la fijación de lo volátil), enroscada alrededor de un huevo, etc. Y así también los emblemáticos colores, verde, blanco, negro y rojo, que tanto tienen un significado alquímico subyacente, como su representación en ofidios de los colores mencionados.

Así también, la serpiente de dos cabezas, representando la armonía o equilibrio del azufre y el mercurio. O la serpiente de tres cabezas, donde nuevamente, sal , azufre y mercurio son los elementos alquímicos esenciales.

El proceso en que el virya se sitúa en su sangre fría, y potencia el lado reptil, es en si una mutación alquímica. Ya que el aspecto reptil se torna ahora predominante, por sobre la matriz homínida, invirtiendo la condición del virya perdido.

El cuerpo de Vraja, incorruptible, es también una mutación alquímica, donde es como una muda de piel ( como la serpiente) , adquiriendo la condición albea (albedo) y escamosa del reptil.

Cabe destacar por otra parte, que en la India, la alquimia era conocida como la ciencia Nagayuna ( Naga/serpiente), y hay incluso representaciones similares al caduceo, denominadas Nagahals.

En esta antigua tradición el elixir era conocido como Amrita, o Rasa.

Bajo ese mismo significado se utiliza el término Rasayana respecto a la alquimia.

Resulta imperativo remarcar que en el sendero kaula, la transmutación alquímica se efectuaba mediante la vía húmeda del maithuna, y el kalas rojo de la suvasini.

En el sendero Kaula la presencia de la Suvasini resulta de vital importancia en la vía tántrica, del mismo modo que en la llamada vía seca de los Trovadores lo es la Dama Kalibur., Y análogamente en la occidental vía alquímica de liberación se cuenta con la necesaria participación de la denominada Soror mística.

Continuando con representaciones alquímicas, también se destaca la serpiente alada, que en la alquimia representa lo volátil , o el Mercurio. En tanto la serpiente sin alas, lo fijo o el azufre.

En la representación del símbolo Uroboros, la serpiente se muerde la cola, lo cual significa el azufre que fecunda el mercurio.

Hay una antigua representación del Uroboros de color verde y rojo ( como el simbolismo apuntado anteriormente). Aquí el verde significa el inicio de la Gran obra, y el rojo la consecución, o Rubedo.

Esta combinación de azufre y mercurio, en sucesivas etapas cada vez mas refinadas, o nupcias químicas, se dice devienen eventualmente en la piedra filosofal o elixir alquímico.

Esas sucesivas nupcias que se repiten sucesivamente forman el Magnum circularis, o la obra circular de los alquimistas.

En china, próxima a la India, es muy prominente el dragón. Y análogamente se encuentran representaciones del Uroboros en forma de dragón.

O también el Uroboros con los colores negro y blanco, alusivos al yin y yang, que en el contexto alquímico significan nuevamente, el mercurio y el azufre.

También en el simbolismo del caduceo, las dos serpientes enroscadas en la vara representan asimismo el azufre y el mercurio, en tanto la vara representa la sal, o elemento conciliador de opuestos.

El caduceo era conocido como agua abismal, agua abismal caótica, y Basilisco o rey de las serpientes.

Otro símbolo alquímico, es la serpiente enroscada alrededor del huevo. Lo cual significa la materia prima (el huevo) que recibe el calor o energía serpentina, para desplegar lo que lleva en germen. Aquí el huevo, representa el atanor alquímico, donde la serpiente del azufre fija el mercurio, y la serpiente del mercurio volatiliza el azufre. De la contienda de ambas, surge el elixir, el cual deviene del veneno de ambas serpientes.

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